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Esta tarta es altamente adaptable a diferentes gustos y preferencias dietéticas. Se puede enriquecer con hierbas frescas como el tomillo o el orégano, y se puede personalizar con otros ingredientes, como champiñones, ajo o incluso algo de carne para darle un toque extra de sabor.
El paso a paso para hacer tarta de espinaca y cebolla en casa
Se puede servir caliente o a temperatura ambiente, lo que la convierte en una opción perfecta para llevar a picnics, reuniones familiares o incluso como parte de un buffet. Conocé cómo hacerla, a continuación.
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La tarta de espinaca y cebolla es una opción rica y sencilla de preparar.
Ingredientes:
Para la masa:
- 1 ½ tazas de harina
- 100 gramos de mantequilla fría, cortada en cubos
- 1 huevo
- 1-2 cucharadas de agua fría
- Una pizca de sal
Para el relleno:
- 300 gramos de espinacas frescas o congeladas
- 2 cebollas grandes, finamente picadas
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 3 huevos
- 200 ml de crema de leche
- 150 gramos de queso ricotta o feta
- 100 gramos de queso parmesano rallado
- Sal y pimienta al gusto
- Nuez moscada al gusto (opcional)
Preparación:
- En un bol grande, mezcla la harina y la sal.
- Añade la mantequilla fría y mezcla con las manos o un cortador de masa hasta obtener una textura de migas finas.
- Agrega el huevo y mezcla hasta que la masa comience a unirse. Si es necesario, añade una o dos cucharadas de agua fría para ayudar a formar una masa homogénea.
- Forma una bola con la masa, envuélvela en papel film y refrigérala durante al menos 30 minutos.
- Calienta el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio. Añade las cebollas y sofríelas hasta que estén doradas y caramelizadas, lo que tomará unos 10-15 minutos.
- Agrega las espinacas a la sartén y cocina hasta que se ablanden y el líquido se evapore, aproximadamente 5 minutos. Retira del fuego y deja enfriar.
- En un bol grande, bate los huevos junto con la crema de leche, el queso ricotta o feta y el queso parmesano. Sazona con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada.
- Incorpora las espinacas y las cebollas caramelizadas a la mezcla de huevos y queso. Remueve bien para combinar todos los ingredientes.
- Precalienta el horno a 180 °C.
- Extiende la masa sobre una superficie ligeramente enharinada hasta formar un círculo lo suficientemente grande para cubrir un molde para tarta de unos 22-24 cm de diámetro.
- Coloca la masa en el molde, presionando suavemente los bordes y recortando el exceso. Pincha la base con un tenedor.
- Vierte el relleno sobre la base de la tarta y distribúyelo uniformemente.
- Hornea la tarta en el horno precalentado durante unos 35-40 minutos, o hasta que el relleno esté firme y la parte superior esté dorada.
- Retira del horno y deja enfriar un poco antes de servir.
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