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Pizza con semolín: la receta simple y económica para hacer cuando quieras

La pizza con semolín es una opción única para hacer en casa, ya que lleva pocos ingredientes y queda súper crocante.

La pizza con semolín se destaca por su textura única y su sabor inigualable. A diferencia de las masas tradicionales que utilizan harina de trigo refinada, esta variante incorpora semolín, que aporta una crocancia excepcional y una miga más densa.

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El semolín le confiere a la pizza una base robusta que soporta generosamente una variedad de ingredientes, desde los más clásicos hasta los más gourmet, sin perder su estructura y manteniendo una mordida crujiente y deliciosa en cada bocado.

El paso a paso para hacer pizza con semolín en casa

Conocé cómo hacer pizza con semolín en casa, con la receta fácil y económica que te compartiremos a continuación, y sorprendé a todos.

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La pizza con semolín es una opción única para hacer en casa, ya que lleva pocos ingredientes y queda súper crocante.

La pizza con semolín es una opción única para hacer en casa, ya que lleva pocos ingredientes y queda súper crocante.

Ingredientes:

Para la masa:

  • 250 g de semolín
  • 150 ml de agua tibia
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de levadura seca instantánea
  • 2 cucharadas de aceite de oliva

Para la cobertura (opcional, según tu preferencia):

  • Salsa de tomate
  • Queso mozzarella rallado
  • Ingredientes adicionales como jamón, champiñones, aceitunas, etc.
  • Orégano u otras especias al gusto

Preparación:

  • En un bol pequeño, mezcla la levadura seca instantánea con el agua tibia y el azúcar. Deja reposar durante 5-10 minutos hasta que la mezcla se vuelva espumosa. Esto indica que la levadura está activa.
  • En un bol grande, mezcla el semolín con la sal. Haz un hueco en el centro y vierte la mezcla de levadura activada y el aceite de oliva.
  • Mezcla todo bien hasta que los ingredientes se combinen y formen una masa homogénea.
  • Saca la masa del bol y colócala sobre una superficie ligeramente enharinada.
  • Amasa durante unos 5-10 minutos hasta obtener una masa suave y elástica.
  • Forma una bola con la masa y colócala en un bol ligeramente aceitado. Cubre el bol con un paño limpio y deja reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
  • Mientras la masa está reposando, precalienta tu horno a la temperatura más alta posible, generalmente entre 250-280°C.
  • Después de que la masa haya duplicado su tamaño, sácala del bol y colócala sobre una superficie enharinada.
  • Con un rodillo, estira la masa hasta obtener el grosor deseado para tu pizza. Si prefieres una base más crujiente, estírala más fina; si prefieres una base más gruesa, déjala un poco más gruesa.
  • Transfiere la masa estirada a una bandeja para hornear previamente enharinada o a una piedra para pizza.
  • Extiende una capa de salsa de tomate sobre la masa y añade queso mozzarella rallado y tus ingredientes favoritos.
  • Coloca la pizza en el horno precalentado y hornea durante 10-15 minutos, o hasta que la masa esté dorada y el queso se haya derretido y esté burbujeante.
  • Una vez lista, saca la pizza del horno y deja enfriar ligeramente antes de cortarla y servirla. Espolvorea con orégano u otras especias si lo deseas.
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