menu
search
Recetas Pizza | harina | ingredientes

Pizza de polenta sin harina: una receta fácil, con pocos ingredientes y libre de gluten

Esta pizza sin masa tradicional se prepara con polenta cocida, no necesita levado y queda lista en menos de 30 minutos. Ideal para una cena rápida y liviana.

La pizza de polenta sin harina es una de esas recetas prácticas que resuelven cualquier comida con pocos ingredientes y sin complicaciones. No lleva harina, no requiere amasado ni levado, y se cocina en horno o sartén. Su base es firme, dorada y con un toque crocante, ideal para sumar salsa, queso y los toppings que más te gusten.

Además de ser apta para personas con celiaquía si se usa polenta libre de gluten, esta versión resulta más liviana y fácil de digerir que una pizza convencional.

Ingredientes para preparar una pizza de polenta sin harina

  • 1 taza de polenta (de cocción rápida o tradicional).
  • 3 tazas de agua.
  • 1 cucharada de aceite de oliva.
  • Sal y pimienta a gusto.
  • ½ taza de queso rallado (opcional, para la base).
  • ½ taza de salsa de tomate casera o comprada.
  • Queso mozzarella en hebras o en fetas.
  • Oregano, albahaca, aceitunas, tomate cherry o los toppings que elijas.

TIP: Para una base más firme, dejá que la polenta se enfríe unos minutos antes de armar la pizza.

LEER MÁS ► Receta de pan integral casero: cómo hacerlo esponjoso, sabroso y con pocos ingredientes

Pizza de polenta 2
No requiere amasado ni levado y se cocina en horno o sartén.

No requiere amasado ni levado y se cocina en horno o sartén.

Paso a paso: cómo hacer pizza de polenta sin harina en pocos minutos

  1. Cocinar la polenta: en una olla, llevá a hervor las 3 tazas de agua con sal. Agregá la polenta en forma de lluvia y cociná a fuego bajo, revolviendo constantemente para evitar grumos. Cuando espese, agregá el aceite de oliva, condimentos y, si querés, un poco de queso rallado.
  2. Armar la base: en una asadera aceitada o con papel manteca, volcá la polenta caliente y distribuí formando un círculo o rectángulo del grosor deseado (entre 1 y 1,5 cm). Alisá bien con una espátula humedecida.
  3. Prehornear la base: llevá al horno precalentado a 200° durante 15 minutos para que se dore y tome firmeza.
  4. Agregar la cobertura: retirá del horno, agregá salsa de tomate, queso y los ingredientes que elijas para tu pizza.
  5. Gratinar y servir: volvé a hornear 10 minutos más, hasta que el queso se derrita y la superficie quede dorada.

Consejos y variantes para una pizza de polenta perfecta

  • Podés colocar la polenta cocida directamente en una sartén antiadherente, dorala a fuego medio 10 minutos, agregá la cobertura y cociná tapado hasta fundir el queso.
  • Podés usar cebolla caramelizada, rúcula fresca, tomate cherry, jamón, atún, champiñones, etc.
  • También pueden hacerse de forma individual. Armá mini pizzas con moldes circulares o directamente sobre la placa.
  • Para más crocancia, agregá un poco de harina de maíz gruesa sobre la base antes de hornear o cociná unos minutos extra.