Una ola de violentos robos y entraderas azota a la zona de la Costa y sectores rurales de los departamentos La Capital y Las Colonias. Lejos de ser solo la ciudad de Santa Fe el punto donde se concentran los robos, otras localidades como Felicia, Monte Vera y Arroyo Leyes fueron invadidas por delincuentes que emplean diversas modalidades delictivas. En menos de dos meses se concretaron más de diez episodios de extrema violencia en esas localidades y en Colastiné Norte donde los delincuentes aprovechan la escasa presencia policial para abordar con violencia a familias e intentar llevarse un cuantioso botín.
En Grutly hubo 10 robos en dos años y no se esclareció ninguno
Si se toma septiembre como punto de partida de un conteo que es preocupante, la saga comenzó el 9 de septiembre con un robo en la localidad de Grutly. El presidente comunal de esa localidad, Víctor Beltramino, le dijo a Luis Mino en el programa Ahora Vengo que en los últimos dos años en esa localidad sufrieron 10 robos violentos y que ninguno fue esclarecido. El escalofriante relato denota la preocupación de una comunidad que hasta el momento no encontró respuestas a la demanda de seguridad y justicia.
"Lamentablemente, me da vergüenza decirlo, la cantidad de robos que sufrimos: diez a mano armada, cuatro en zona rural y seis en zona urbana", describió Beltramino que dijo que los robos se repiten sin distinguir lugar ni tipo de víctimas. Entre ellas figuran personas mayores a las que los asaltaron en más de una oportunidad, un matrimonio al que delincuentes ingresaron a su vivienda en búsqueda de moneda extranjera, tamberos y un empleado de la comuna, a quien golpearon brutalmente y que debió ser hospitalizado. "Tenemos que dar gracias que no hubo víctimas", señaló.
Una pareja maniatada en Felicia
El siguiente hecho se remontó al martes 20 de septiembre cuando tres delincuentes maniataron y le robaron a una pareja de la localidad de Felicia. Miguel Kunz, la víctima del violento robo, habló con Luis Mino sobre el difícil momento que vivieron él y su mujer, que hace 20 años viven en la pequeña localidad y nunca les había pasado nada similar. “Gracias a Dios no me pegaron un tiro”, dijo angustiado.
El hombre contó que, a las 19.20 aproximadamente, se sentó a la mesa con su mujer y escucharon el timbre. Cuando se levantaron para ver quién era ya tenían adentro de su casa a tres delincuentes armados. “Nos pusieron los revólveres en la cabeza a mí y a mi mujer, y me dijeron que me quede quieto porque si no la iban a matar”, expresó. En tanto, explicó que durante la violenta secuencia, a él le pegaron con el arma en la cabeza, lo agarraron a patadas en el suelo y le pegaron en la espalda. “Me rompieron dos costillas y me ataron”, expresó.
Conmocionada por la situación, la mujer se descompensó, mientras los delincuentes insistían a los gritos y revolvían toda la casa. “Se llevaron 70 mil pesos que teníamos para pagarle a los viajantes, armas que había en el ropero, escopetas que no se usaban, anillos que no valen nada y cadenitas de fantasía”.
Consultado sobre cómo terminó la entradera, Miguel contó que en un momento llegaron dos clientes y a él se le ocurrió decirle a los delincuentes que eran los jugadores de fútbol que venían por un partido. “Los tres hombres se empezaron a mirar y a chistar entre ellos y se escaparon por otra puerta. Cuando entraron los chicos le pedí que lo desaten y pude llamar a la policía”, concluyó.
Cuatro encapuchados en una casa de Monte Vera
El domingo 17 de octubre por la noche, cuatro delincuentes encapuchados ingresaron a una vivienda ubicada en Aristóbulo del Valle al 11.500 jurisdicción de Monte Vera.
Según información policial, el hecho se concretó en una casa y cuando los ladrones entraron, solo se encontraban dos chicas menores de edad, de 14 y 15 años, hijas de la pareja dueña la vivienda.
La fiscalía tomó declaraciones a una de las menores que estaba en la casa al momento del hecho y se realizaron tareas investigativas de rigor.
Una noche de terror para una familia en Monte Vera
El 22 de octubre a la nochecita, una familia de ocho personas vivió una entradera brutal, en una vivienda ubicada en el kilómetro 19.5 de la Ruta Provincial N° 2.
Eran cerca de las 20.10, Carlos estaba finalizando su tarea como quintero y fue reducido por los delincuentes. "Me pusieron un revólver en la cabeza y me exigían dólares joyas, nos decían que nos iba a torturar si no les daba dinero. Éramos ocho personas en la casa. Estaban mis sobrinos, nietos, mis hijos y mi esposa", relató por AIRE el entrevistado.
A Carlos lo tuvieron atado en el piso del comedor, llegó su cuñado a buscar a los hijos y también lo redujeron. Los ladrones golpearon a un sobrino de Carlos que los miró a la cara.
Dos horas y media estuvieron los delincuentes, desde las 20.10 hasta las 22.30. Se llevaron dinero, los ahorros de toda la familia, tiraron los roperos al piso y dieron vuelta los sofás. "Esto te cambia la vida, antes si de noche te olvidabas algo afuera salías, ahora llega la tardecita y te guardás adentro", advirtió
Violencia extrema en Arroyo Leyes
El 27 y el 31 de octubre dos violentas entraderas se produjeron en Arroyo Leyes. La primera de ellas tuvo como víctimas a Deomar, un hombre de 67 años, y a su esposa. La segunda tuvo como víctima a una mujer de 35 años que vive en el límite entre San José del Rincón y Arroyo Leyes.
El jueves 27 de octubre a la noche un matrimonio de Arroyo Leyes se convirtió en víctima de una violenta entradera a mano de tres delincuentes. Por los golpes y cortes que sufrió durante el ataque, el hombre de 67 años fue asistido en el hospital Cullen.
Desde la escena del ataque, en diálogo exclusivo con AIRE, Deomar relató los pormenores de la escena de terror que vivió junto a su mujer en el interior de la vivienda.
“Eran las 22.30 de la noche cuando escuché ruidos que venían de la puerta del fondo”, comenzó contando Deomar. Tras darse cuenta de que un hombre intentaba ingresar a las patadas a la casa, alertó a su mujer para que llame a la policía.
A pesar de los esfuerzos del dueño, los delincuentes ingresaron. “Yo vi uno que estaba armado”, confirmó el hombre a Luis Mino en Ahora Vengo. En ese momento comenzó un forcejeo en el que al ladrón se le escapó el disparo. Ante la resistencia de la víctima, uno de los atacantes comenzó a golpearlo con culatazos en la cabeza, al grito de: “Dame la plata”.
El 31 de octubre, una mujer de 35 años fue víctima de un robo en el interior de su domicilio en San José del Rincón casi Arroyo Leyes. Cuando se despertó alrededor de las 7 de la mañana, advirtió la presencia del delincuente quien la amenazó con un arma blanca, la encerró en el baño y le dijo “Por el bien de los dos quedate tranquila”.
La mujer estuvo encerrada durante unos minutos, y cuando segura de que el ladrón ya se había escapado, pidió auxilio a través del ventiluz del baño. Vecinos acudieron a rescatarla y a tranquilizarla tras el mal momento que atravesó. Al llegar personal de la subcomisaría 14, la víctima denunció que le faltó una licuadora, una juguera, un celular y 1.000 pesos en efectivo.
Una madrugada violenta en Colastiné Norte
En la madrugada del 14 de noviembre se sucedieron dos hechos de violencia en Colastiné Norte. En uno de los episodios, un hombre de 75 años fue víctima de delincuentes que entraron a su casa, le pusieron un cuchillo en la garganta y le robaron dinero, una moto y herramientas. En el otro, dos delincuentes destrozaron a patadas una puerta, luego barretearon la reja de un cuarto trasero y vieron que el dueño de casa los esperaba con una escopeta, momento en que escaparon. "Si no hubiese tenido un arma me matan adentro", dijo Oscar, la víctima del intento de robo.
El ataque a cuatro personas mayores en Estación Ascochinga
Una brutal entradera se produjo el 15 de noviembre en paraje Estación Ascochinga, jurisdicción de Monte Vera. Un matrimonio y dos abuelos fueron víctimas de dos delincuentes armados que los redujeron y, por una hora y media, estuvieron dentro de la casa. Al hombre de 62 años y a su esposa los golpearon mientras los abuelos miraban la escena desde dos sillones.
La familia, que disfrutaba de una tranquila noche en su casa ubicada en el kilómetro 21 de la Ruta Provincial N° 2, jamás imaginó que iba a protagonizar una pesadilla semejante, hasta que los delincuentes redujeron al hombre y entraron a la vivienda, cerca de las 21.
Juan, yerno del dueño de casa, contó desde el móvil de AIRE cómo se produjo la entradera. "Dos delincuentes de entre 35 y 40 años armados, uno de ellos a cara descubierta, sorprendieron a mi suegro por la espalda. Le empezaron a dar culatazos y palazos y luego, también golpearon a mi suegra. Les apuntaron en la cara y los obligaron a tirarse al piso. A los dos abuelos los dejaron sentados en los sillones mirando todo", relató el entrevistado.
Luego, los delincuentes los encerraron en el baño y se apropiaron de la casa. Pedían dólares que la familia no tenía. Agarraron la llave de la camioneta familiar y cargaron televisores, computadoras y herramientas de trabajo. También se llevaron dinero en efectivo.
"Están todos en shock. Mi suegro está internado, consciente pero aturdido por la cantidad de golpes que tuvo en la cabeza. Pido por favor que haya más patrullajes en la zona o que pongan una base de Comando Radioeléctrico, ya que la policía nos dijo que hubo al menos cinco robos de similares características, en los últimos dos meses", señaló Juan.
El asalto a la subcomisaría de Arroyo Leyes
En la madrugada de este jueves 17 de noviembre se produjo un insólito suceso en la comuna de Arroyo Leyes. Un grupo de siete personas vestidos de policías protagonizó un golpe comando a la Subcomisaría 20° de esa localidad. El ataque se registró en las primeras horas de la madrugada cuando un grupo de delincuentes vestidos como policías ingresó a la seccional y maniató a los dos agentes que estaban de servicio, sustrajeron una escopeta, armas reglamentarias y un chaleco de balística.
El avance de la investigación hizo que la fiscal del caso, Rosana Peresín, delegara las primeras medidas al personal de Asuntos Internos de la Policía, dependiente de la Agencia de Control Policial Centro Norte de Santa Fe.
El suceso ocurrió pasadas la 1.30 y tuvo lugar en la dependencia ubicada en el kilómetro 14 de la ruta provincial 1. En el lugar redujeron a dos agentes a los cuales le sacaron sus celulares, sustrajeron tres termos, dinero en efectivo (cercano a los 30 mil pesos) y se llevaron un móvil policial. La banda huyó del lugar en dos grupos: uno a bordo de un móvil de la dependencia; y el otro en un Peugeot 206 propiedad de un vecino de la zona al que también asaltaron. El escape se dio en dirección al sur por lo que agentes de otras áreas de la policía iniciaron un intenso patrullaje por la zona de la costa.
Le pegaron con un fierro para robarle
El último hecho fue durante la madrugada de este jueves 17 de noviembre cuando una mujer dormía en su casa en Colastiné Norte. Un hombre ingresó por un ventiluz de la casa de la víctima y la golpeó violentamente con un fierro en todo el cuerpo para robarle, pero no se llevó nada. El domicilio está ubicado a la altura del kilómetro 1 de la ruta 1, en calles Chanáes y Cajellón de los Canillitas
"El hombre ingresó tan rápido por un ventiluz del comedor que no pude hacer nada más que correr hacia el comedor, a buscar con qué defenderme", contó a AIRE la víctima, que terminó con diversas heridas en su cuerpo.
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