Una violenta entradera terminó con un hombre herido y trasladado al hospital José María Cullen, donde permanece internado. El hecho tuvo lugar este jueves por la noche en una vivienda de Arroyo Leyes. El matrimonio se encontraba en el interior de la vivienda cuando ingresaron tres violentos delincuentes que les hicieron pasar una noche de terror.
El hombre de 67 años fue trasladado y asistido en el hospital Cullen por las heridas que sufrió durante el robo.
Maiquel Torcatt / Aire DigitalEl hombre de 67 años estaba en el comedor mirando televisión y comiendo helado, cuando observó que la puerta del frente comenzó a moverse. Al acercarse vio que tres hombres intentaban ingresar a la fuerza a la casa, dos de ellos usaban barbijo mientras que el tercero estaba a cara descubierta. A pesar de los esfuerzos del dueño de casa para aguantar las puertas, los delincuentes lograron entrar.
Al ingresar, el propietario observó que los tres sujetos estaban armados y comenzó a forcejear con uno de ellos, al que se le escapó un disparo que impactó en el piso. Ante la resistencia de la víctima, uno de los atacantes comenzó a golpearlo con culatazos en la cabeza, al grito de: “Dame la plata”.
Los ladrones trasladaron al hombre al dormitorio en donde se encontraba la mujer y los maniataron con cinta de embalar, al mismo tiempo que exigían que les entregaran el dinero.
Tras encontrar una importante suma de dinero dentro de uno de los muebles del dormitorio, los sujetos abandonaron el ambiente dejando a los dueños de casa maniatados en la pieza y se dirigieron hacia el comedor donde siguieron hurgando en las pertenencias y elementos.
La situación se extendió por unos minutos, tras los cuales los propietarios no escucharon más ruidos. Tras lograr zafarse y liberar a su mujer, el matrimonio se dirigió a la sub comisaría 20 a denunciar el hecho. La víctima llegó a la dependencia sangrando y visiblemente herido.
El caso fue informado a la fiscal en turno, la doctora Urquiza, que dispuso la intervención de la AIC (Agencia de Investigación Criminal). Los investigadores realizaron una verificación por la zona en busca de cámaras de seguridad y testigos del hecho. Durante el procedimiento los investigadores encontraron una bala incrustada en el piso del comedor e interrogaron a una vecina de 29 años de edad.
Personal del 107 asistió a la víctima de 67 años, que fue trasladada al Hospital Cullen a los fines de que se le realice una tomografía.
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