menu
search
Salud obesidad | nutrición | Alimentación

Ozempic para combatir la obesidad: mitos, efectos reales y el debate sobre su uso

La nutricionista Virginia Yódice advirtió en AIRE que las inyecciones para bajar de peso “pueden funcionar como herramienta”, pero remarcó que implican riesgos cuando se consumen sin acompañamiento médico y psicológico.

El furor por las inyecciones para adelgazar llegó a consultorios, redes sociales y conversaciones cotidianas. Frente a la tendencia, Virginia Yódice, Magíster y Licenciada en Nutrición, analizó en diálogo con AIRE qué hay detrás de fármacos como Ozempic, que prometen quitar el apetito y acelerar el descenso de peso como tratamiento para la obesidad.

En primera instancia, Yódice explicó que “más allá de su presentación comercial, hace varios meses distintas personas se aplican esta medicación”. Y resumió: “Es una droga que te quita el apetito. Se reduce la ingesta y aparece una sensación de plenitud por muchas horas”.

LEER MÁS ► Santa Fe cambia las reglas para las apps de viaje: nuevos requisitos para choferes y autos

Ozempic: un cambio abrumador que puede ser un arma de doble filo

En contacto con el programa Algo Que Decir, la nutricionista reconoció que hay pacientes que pueden verse beneficiados, aunque insistió en que el impacto es muy intenso: “La contracara de comer como un pajarito es bajar de peso muy rápido y perder masa corporal de forma brutal”.

Por eso, evita romantizarlo como una solución mágica. “Lo hablamos mucho con médicos y psicólogos. La obesidad es una condición compleja: hormonal, social, conductual. No existe un abordaje que funcione sin acompañamiento profesional”, sostuvo.

Embed

Yódice aclaró además que se trata de una medicación bajo prescripción médica y que tiene diez pacientes que la consumen, todas mujeres.

La licenciada también explicó que cuando alguien con obesidad comienza a comer como una persona de mucho menor peso, su cuerpo queda sin los nutrientes que necesita. “Tiene que producir glóbulos rojos para su peso, necesita energía para su peso. Si el déficit es enorme, los sistemas empiezan a reclamar”, detalló.

obesidad.jpg
La nutricionista opinó que una de las consecuencias negativas de que se formalice a la obesidad como enfermedad sería el disparador masivo de prescripciones médicas para combatirla.

La nutricionista opinó que una de las consecuencias negativas de que se formalice a la obesidad como enfermedad sería el disparador masivo de prescripciones médicas para combatirla.

La polémica por declaraciones de Robbie Williams y los supuestos efectos del Ozempic en la visión

Yódice también fue consultada por las declaraciones de Robbie Williams, quien afirmó que el Ozempic le habría afectado la visión. “Me parece apresurado decir que mucha gente perdió la visión por la inyección. Faltan instancias para sostener una afirmación así”, remarcó.

Un debate urgente en torno a la obesidad: entre la romantización y la medicalización extrema

Yódice remarcó que se está analizando la posibilidad de que haya reconocimiento oficial de la obesidad como enfermedad en Argentina, lo que modificaría el abordaje, pero advirtió que ese paso también abre un dilema.

LEER MÁS ► El impacto de los femicidios y de la violencia de género en la infancia y la adolescencia

Según explicó, si la obesidad se incorpora al marco legal como enfermedad, el acceso a medicaciones para bajar de peso podría dispararse sin criterios sólidos, con el riesgo de profundizar la medicalización de personas que ya llegan muy atravesadas por tratamientos previos.

Para la nutricionista, el desafío pasa por evitar ambos extremos y construir políticas que prevengan, acompañen y no dependan únicamente de una inyección.