La pastafrola es un postre clásico que combina la suavidad del dulce de membrillo con la textura crujiente de la masa. Si siempre has querido probar tu destreza en la repostería, esta receta en cuatro simples pasos es perfecta para vos. Sorprende a tu familia y amigos con esta delicia casera.
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Cómo hacer la mejor pastafrola en casa
Ingredientes:
- Masa para tarta (puedes comprarla lista o prepararla en casa).
- Dulce de membrillo (aproximadamente 400 gramos).
- Azúcar (para espolvorear).
- Huevo (1 unidad).
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Instrucciones:
- Paso 1: Precalienta tu horno a 180 °C. Enharina una superficie plana y estira la masa para tarta con la ayuda de un rodillo hasta que tenga el tamaño de tu molde. Luego, coloca la masa en el molde previamente enmantecado y enharinado, asegurándote de que cubre bien el fondo y los bordes. Pincha la base con un tenedor para evitar que se infle mientras se hornea.
- Paso 2: Toma el dulce de membrillo y córtalo en tiras finas. Derrítelo en una caserola con un poco de agua a fuego mínimo. Distribuye el dulce de manera uniforme sobre la masa.
- Paso 3: Para crear el clásico enrejado de la pastafrola, corta tiras finas de masa y colócalas cruzadas sobre el dulce de membrillo. Esto le dará ese aspecto característico y delicioso.
- Paso 4: Bate un huevo y pincela la superficie de la masa con él. Espolvorea azúcar sobre el enrejado. Lleva la pastafrola al horno precalentado durante aproximadamente 30-35 minutos o hasta que la masa esté dorada y crujiente. Una vez lista, déjala enfriar antes de cortarla en porciones y servirla.
Consejos para una pastafrola perfecta:
- Puedes personalizar tu pastafrola agregando coco rallado sobre el dulce de membrillo o esencia de vainilla a la masa.
- Asegúrese de que la masa esté bien cocida y dorada para obtener la mejor textura.
- Esta pastafrola es perfecta para acompañar con mates, una taza de té o café.
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