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Grisines de queso y semillas: la receta sencilla y práctica para la tarde

Los grisines de queso y semillas son ideales para hacer y compartir junto a la familia. El paso a paso para hacerlos en casa, a continuación.

Los grisines de queso y semillas son una opción deliciosa y saludable para acompañar comidas, servir como aperitivo o disfrutar como snack. Estos palitos crujientes se destacan por su textura ligera y su sabor intenso a queso, complementado con el toque nutritivo y crujiente de las semillas.

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La combinación de diferentes tipos de queso, como el parmesano o el cheddar, junto con una mezcla variada de semillas como sésamo, chía o girasol, no solo aporta un sabor exquisito sino también beneficios nutricionales, convirtiéndolos en una elección popular para aquellos que buscan un bocadillo sabroso y saludable.

El paso a paso para hacer grisines de queso y semillas

Su versatilidad los convierte en un excelente complemento para ensaladas y sopas, añadiendo un toque crujiente a cualquier plato. Además, son una opción ideal acompañar los mates de la tarde. El paso a paso para hacerlos en casa, a continuación.

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Los grisines de queso y semillas son ideales para hacer y compartir junto a la familia.

Los grisines de queso y semillas son ideales para hacer y compartir junto a la familia.

Ingredientes:

  • 250 gramos de harina de trigo
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 1 sobre de levadura seca (7 gramos)
  • 150 ml de agua tibia
  • 50 ml de aceite de oliva
  • 100 gramos de queso rallado (parmesano, cheddar o una mezcla de ambos)
  • Mezcla de semillas (sésamo, chía, girasol, etc.)
  • 1 huevo batido (opcional, para pincelar)

Preparación:

  • En un bol grande, mezcla la harina con la sal y el azúcar.
  • Disuelve la levadura seca en el agua tibia y deja reposar durante unos 5 minutos hasta que esté espumosa.
  • Añade el agua con levadura y el aceite de oliva a la mezcla de harina. Mezcla bien hasta formar una masa homogénea.
  • Incorpora el queso rallado a la masa y amasa durante unos 5-7 minutos, hasta que la masa esté suave y elástica.
  • Forma una bola con la masa, colócala en un bol ligeramente aceitado y cúbrela con un paño húmedo o film plástico.
  • Deja reposar la masa en un lugar cálido durante aproximadamente 1 hora, o hasta que haya duplicado su tamaño.
  • Precalienta el horno a 200 grados Celsius (390 grados Fahrenheit).
  • Divide la masa en porciones pequeñas y extiende cada porción en una superficie ligeramente enharinada, formando tiras largas y delgadas.
  • Si deseas, puedes retorcer ligeramente las tiras para darles una forma rústica.
  • Coloca las tiras en una bandeja para hornear forrada con papel pergamino.
  • Pincela ligeramente las tiras de masa con el huevo batido para que las semillas se adhieran mejor (este paso es opcional).
  • Espolvorea generosamente la mezcla de semillas sobre las tiras de masa, presionando suavemente para que se adhieran bien.
  • Hornea los grisines en el horno precalentado durante unos 15-20 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes.
  • Vigílalos de cerca para evitar que se quemen.
  • Retira los grisines del horno y déjalos enfriar completamente sobre una rejilla.
  • Una vez fríos, guárdalos en un recipiente hermético para mantener su frescura.
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