La acusación contra Grau y Odriozola es sostenida por los fiscales de la Unidad de Delitos Complejos, Bárbara Ilera y Ezequiel Hernández, quienes los sindican como jefes de una asociación ilícita que defraudó las arcas del estado a través del arreglo de móviles policiales; en tanto, las defensoras públicas Ileana Echaniz y Virginia Balanda sostienen que los acusados desconocían lo que ocurría en el departamento de Logística.
Los testigos fueron convocados por las Defensas, y recordaron cómo era la actividad profesional y el trabajo que realizaban bajo las órdenes de los exjefes acusados.
LEER MÁS ► Fraude en el D4: comenzaron a declarar los testigos de la defensa en el juicio a los exjefes de la Policía de Santa Fe
TRIBUNAL JUICIO D4.jpg
Celeste Minniti, Cecilia Labanca y Sebastián Szeifert, los jueces que conforman el tribunal
Fin de los testimonios
“Era imposible que el jefe controlara todo lo que se firmaba, todos los días se firmaba infinidad de documentación”, recordó Gabriel Legstra, quien fue jefe de la Policía de Santa Fe en 2007. El testigo también refirió que el control de cada departamento de la Jefatura dependía del responsable de esa área.
También declaró José Luis Amaya, quien fue subjefe durante la gestión de Grau; este testigo refirió que el trabajo con los diferentes departamentos se hacía a través de reuniones periódicas con los responsables de cada área, y precisó que, mientras fue subjefe, nunca firmó ningún cheque.
Por su parte, quien fue Secretario de Seguridad Pública durante el gobierno de Antonio Bonfatti, Gerardo Chaumont, sostuvo que se mantenía diálogo constante y que Grau coincidía en la visión que tenía el gobierno sobre lo que necesitaba la policía: el personal estaba falto de motivación, el equipamiento no era suficiente y había una gran corrupción, por eso fue designado Grau al frente de la Fuerza, para que resolviera esos problemas.
A continuación declaró quien se desempeñó como secretario de Odriozola, y precisó que diariamente se dejaban expedientes y chequeras para firmar en el despacho del jefe; recordó lo dinámico que era cada día de trabajo y que jamás se dejaba nada sin firmar.
Luego declaró quien fue jefe del D1 (Departamento Personal) y D5 (Departamento Judicial) en 2015, quien explicó cómo era un trámite administrativo ante un pedido de licencia o de pase, y en qué momento llegaba la firma del jefe de Policía.
Finalmente declaró la esposa de Odriozola, quien dio detalles de cómo se vio alterada la vida familiar cuando fue designado como jefe de la fuerza, y por qué en 2015 dejó el cargo tras haber sido diagnosticada ella de una grave enfermedad. El exjefe acusado escuchó la declaración de su esposa con lágrimas en los ojos, y por último la mujer recordó un trágico accidente de tránsito que golpeó a la familia.
En tanto, el debate se reanudará el lunes con la declaración de los acusados, y tras ello sólo quedará la jornada de alegatos de clausura y la sentencia.