Por la sala 6 de tribunales pasaron policías retirados, algunos de ellos desempeñaron en la plana mayor de la Fuerza bajo las órdenes de Grau, y otros fueron parte de la división de Asuntos Internos.
La acusación contra Grau y Odriozola es sostenida por los fiscales de la Unidad de Delitos Complejos, Bárbara Ilera y Ezequiel Hernández, quienes los sindican como jefes de la asociación ilícita; en tanto, las defensoras públicas Ileana Echaniz y Virginia Balanda sostienen que los acusados desconocían lo que ocurría en el departamento de Logística.
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Rafael Grau y Omar Odriozola fueron jefes de la Policía de Santa Fe en 2015 y 2016
"Una Policía Ordenada"
Una de las testigos fue Jefa del departamento de Personal (D1), convocada por Rafael Grau, tras nueve años en asuntos internos. La testigo recordó que Grau "quería en la Policía orden, disciplina y control, quería orden dentro de la Policía".
La exfuncionaria sostuvo que el entonces Jefe "me ordenó que recibiera a todo el personal, y a los pocos días vinieron dos suboficiales a hablar conmigo porque le habían pagado el pase de la UR2 a la UR1 al jefe departamental anterior, y como sabían que había cambiado el jefe y no había hecho el pase querían que les devolviera la plata o que se concrete el pase, entonces fui a hablar con el jefe Grau y el me dijo que había que judicializar la situación y que los trasladara al departamento de judiciales (D5)".
La testigo explicó cómo se organizan los pases de los policías, y que pagar por un pase es un delito. Ante una pregunta del fiscal Ezequiel Hernández, afirmó que se había radicado una denuncia penal por ese hecho.
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La Fiscalía considera que los policías estaba al frente de una asociación ilícita que defraudaba las arcas del estado provincial
A continuación declaró quien se desempeñó en esos años como jefa del D5, también convocada por Rafael Grau en octubre de 2015, “porque quería personal responsable y con una carrera intachable, y que fuera responsable”, recordó la testigo. "En una reunión con Grau, dijo que quería controlar todas las áreas de las Unidades Regionales, debíamos ir a inspeccionar y controlar el funcionamiento de cada área de las unidades", agregó.
Ante preguntas de la Fiscalía sostuvo no recordar si se habían detectado irregularidades en los funcionamientos de los diferentes departamentos de las 19 Unidades Regionales que hay en la provincia, y luego recordó el episodio de los suboficiales que habían pagado el pase.
La testigo recordó que dos suboficiales se habían presentado en el D1 y que fueron trasladados al D5: “Se iniciaron las actuaciones que corresponden, y se puso en conocimiento a través de un escrito a la Fiscalía”. El fiscal Hernandez insistió en la pregunta, ya que no hay registro en la Fiscalía de tal denuncia; la testigo alegó no recordar puntualmente en este caso, pero que ese era el proceder habitual.
El viernes a partir de las 8:30 continuarán declarando los testigos convocados por las Defensas.
Las claves de la causa contra los exjefes de la Policía de Santa Fe
- La denuncia fue presentada por Pullaro en 2016: la investigación se originó a partir de una denuncia presentada por el entonces ministro de Seguridad y hoy gobernador de Santa Fe. En ese momento, Pullaro advirtió sobre posibles maniobras delictivas en el área de reparación y compra de repuestos para móviles policiales, dependiente del Departamento de Logística, conocido como D4.
- Allanamiento del D4 y documentación clave: el fiscal Roberto Apullán solicitó el allanamiento del D4. Durante ese procedimiento, se secuestró documentación que resultó clave para avanzar en la causa. Allí se detectó que un lavadero de autos emitía facturas como si fuera un taller mecánico, y se vinculó además a un comercio de repuestos y a un taller en las maniobras investigadas.
- La causa pasó a la Fiscalía de Delitos Complejos: en 2017, la investigación quedó en manos de la Fiscalía de Delitos Complejos y Violencia Institucional, a cargo de Ezequiel Hernández, junto con la entonces fiscal Mariela Jiménez.
- Involucrados: se identificó a una gran cantidad de involucrados, tanto funcionarios del Ministerio de Seguridad como comerciantes. Entre los imputados estuvieron contadores del Ministerio que actuaban como habilitados, así como el responsable del Departamento de Logística.
- La mayoría cerró su causa con abreviados: todos los involucrados —excepto Grau y Odriozola— acordaron su salida del proceso penal mediante probation o juicios abreviados.
- El rol que la Fiscalía atribuye a Grau y Odriozola: la Fiscalía sostiene que Grau y Odriozola fueron los jefes de la asociación ilícita y que aprovecharon su jerarquía para facilitar y permitir las maniobras delictivas. En la acusación se remarca que "dispusieron los medios por los cuales la organización se valió para ejecutar sus planes criminales, habilitaron el ámbito de las maniobras defraudatorias y consintieron las actividades ilícitas desplegadas”.