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Qué es la panna cotta y cómo hacer este postre cremoso en casa con sólo tres ingredientes

Descubrí el paso a paso de esta imperdible receta para sorprender a todos.

La panna cotta es uno de los postres más icónicos de la cocina italiana y, al mismo tiempo, uno de los más fáciles de preparar. Su nombre significa literalmente “nata cocida”, y aunque suene sofisticado, lo cierto es que puede hacerse en casa con solo tres ingredientes básicos.

Te contamos el paso a paso de esta receta imperdible, ideal para sorprender con algo diferente, sin complicarse demasiado.

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¿Qué es la panna cotta?

Originaria del norte de Italia, particularmente de la región del Piamonte, la panna cotta es un postre lácteo de textura firme pero sedosa, similar a un flan, pero sin huevos. Tradicionalmente se sirve frío, acompañado de frutas frescas, salsas de frutos rojos o caramelo.

Panna cotta de vainilla: la receta sencilla para hacer un postre rico con pocos ingredientes
Una receta imperdible para hacer de forma fácil y rápida.

Una receta imperdible para hacer de forma fácil y rápida.

Su base es muy simple: crema, azúcar y gelatina. La mezcla se calienta, se enfría en moldes y se desmolda para disfrutarla como un manjar cremoso y refrescante.

Los tres ingredientes que necesitás

  • 500 ml de crema de leche (nata)

  • 50 g de azúcar

  • 1 sobre (7 g) de gelatina sin sabor.

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Preparación

  1. Si usás gelatina en polvo, colocala en un recipiente pequeño con 3-4 cucharadas de agua fría y dejala reposar 5 minutos.
  2. En una olla, colocá la crema de leche y el azúcar. Calentá a fuego medio, revolviendo de vez en cuando, hasta que el azúcar se disuelva por completo. No debe hervir, solo calentar bien.
  3. Retirá la crema del fuego. Incorporá la gelatina hidratada y mezclá bien hasta que se disuelva por completo. Si querés, este es el momento de sumar una cucharadita de esencia de vainilla o ralladura de cítricos para darle más sabor.
  4. Distribuí la mezcla en moldes individuales (pueden ser de silicona, flaneras, vasitos o copas) y llevá a la heladera por al menos 4 horas, o hasta que esté completamente firme.
  5. Desmoldá con cuidado y serví sola o con un toque de salsa de frutos rojos, miel, caramelo o frutas frescas.