Los vecinos del barrio Mayoraz cansados de los robos se reunieron este viernes a la mañana en la esquina de 9 de Julio y Diagonal Martínez. Hace diez días fueron recibidos por autoridades policiales y funcionarios del Ministerio de Seguridad quienes les prometieron ordenar que se patrulle más la zona y les dijeron que iban a incorporar más efectivos policiales capacitados. Pasó el tiempo y los habitantes del barrio dicen que los patrullajes se reforzaron los días posteriores al encuentro y que luego cesaron.
Santiago, uno de los vecinos dijo desde el móvil de Aire de Santa Fe, "Hace tiempo que estamos teniendo robos entraderas y arrebatos. Queremos más controles y patrullajes, queremos que la policía conozca el barrio porque acá te metés en un lado y salís por el otro. Durante los días posteriores a la reunión se vio más presencia policial y luego mermó."
Los vecinos reclaman ayuda pero al mismo tiempo reconocen que en ocasiones, la policía actuó correctamente. Hubo entraderas en Pasaje Hudson, la policía actuó y detuvieron a dos personas. La constitución peculiar del barrio con el predominio de diagonales lo transforma en el paso obligado de mucha gente y los vecinos desconfían.
Entre vecinos tienen un grupo de whatsapp para avisarse entre ellos por alguna situación en particular. Reclaman cámaras de seguridad en las principales arterias del barrio. Por último, los habitantes de la zona se comprometieron en denunciar cualquier hecho delictivo que ocurra, tal cual se lo pidieron las autoridades, a la Central de Emergencias 911.
Robo en una pollería del Barrio Mayoraz: 17 de septiembre
Un joven comerciante de barrio Mayoraz fue víctima de un violento robo en su pollería el pasado 17 de septiembre cuando dos personas lo amenazaron con un arma de fuego y se llevaron el dinero de la caja registradora.
El local está ubicado en la esquina de Diagonal Aguirre y Pasaje Pasteur. Iván expresó desde el móvil de Aire de Santa Fe en una entrevista con el periodista Ignacio Laurenti que cuando vio a la moto detenerse en la puerta del negocio “en actitud sospechosa”, salió a atenderlos a la vereda.
“Uno me preguntó si tenía cigarrillos y entró, el otro me dijo que me meta adentro entonces cerré la puerta para que no entre, y ahí se provocó el estallido del vidrio”, explicó el joven.
“El otro estaba adentro, armado, y se llevó el dinero de la caja… Todo el tiempo con amenazas, tenía un pistolón: te quemo, te tiro”, recordó.
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