“Es a consecuencia de no cumplir con el calendario de vacunación”, afirmó Capone al explicar el regreso de patologías como el sarampión y la tos convulsa. Señaló que después de la pandemia se consolidaron grupos organizados que promueven ideas falsas sobre las vacunas, algunas impulsadas incluso desde espacios institucionales.
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El riesgo sanitario por sarampión
Capone remarcó que el sarampión es “mucho más contagioso que el COVID”, y explicó que una sola persona puede transmitirlo a entre 17 y 21 personas, lo que representa un riesgo sanitario global en un contexto de alta circulación de viajeros.
A esto se suma el avance de la tos convulsa, vinculada también a la caída en la aplicación de vacunas del calendario nacional.
El especialista valoró que en localidades de Santa Fe se están retomando campañas casa por casa y operativos en escuelas, donde equipos de salud vacunan a los chicos dentro de los establecimientos para recuperar coberturas.
Desfinanciamiento de políticas preventivas a nivel Nacional
Capone cuestionó el enfoque sanitario del Gobierno Nacional y advirtió por el “desfinanciamiento de políticas preventivas”. Mencionó recortes en programas de HIV, tuberculosis y hepatitis virales; dificultades para el acceso a anticonceptivos; y despidos en hospitales nacionales como el Posadas.
“El sistema actual piensa la salud como reparación y no como prevención”, afirmó. También planteó la precarización que atraviesan residentes y trabajadores de enfermería: “Corren de una guardia a otra, con sueldos que no alcanzan la canasta básica”.
Capone relató su participación en una audiencia en el Congreso donde se encontró con militantes antivacunas: “Había una fila a favor de las vacunas y otra del lado antivacuna”.
El prestigio internacional del calendario argentino
El médico subrayó que el calendario de vacunación argentino es reconocido y premiado en el mundo, con coberturas históricas superiores al 95%. “Es un ejemplo internacional, una eminencia”, sostuvo.
Para Capone, discutir hoy su obligatoriedad es “retrotraer la ciencia al medioevo”, y recordó que las políticas que más mejoraron la salud pública en la historia fueron la vacunación y el acceso al agua potable.