Ocho años después, su mamá, Gabriela Covelli se debate entre el "dolor inexplicable" de haber perdido a su hijo y la satisfacción de que, a partir de su lucha, la Argentina cuenta ahora con una Ley de Calidad y Seguridad Sanitaria, conocida como Ley Nicolás, que busca reducir los casos de mala praxis médica, transparentar el sistema y salvar vidas.
El médico que trató a Nicolás aseguró en un principio que los dolores de cabeza se debían a una contractura cervical. Luego, a la combinación de una sinusitis mal curada y angina.
Las horas pasaban, la familia pedía nuevos estudios o que fuera trasladado a otro centro asistencial. Pero el médico insistía en inyectarle calmantes y antiflamatorios a un paciente cuya vida poco a poco se apagaba.
Luego de varios días en que la condición de Nicolás seguía empeorando, decidieron sacarlo de la clínica privada donde estaba y trasladarlo a otro centro de salud. Apenas terminaron de evaluarlo, una médica de la Guardia se acercó al profesional que venía tratando a Nicolás y le dijo: "¡Qué hiciste!... ¡qué hiciste!... ¡Este chico tiene un cartel así de grande que dice meningitis!".
Pero ya era tarde. Nicolás estuvo nueve días intubado en Terapia Intensiva: "Yo he visto a los médicos llorando detrás de una columna. Hasta que el jefe de Terapia Intensiva dijo que lo único que podía hacer era permitir que ingresaran tos sus amigos para que pudieran verlo", recordó Gabriela.
Ley Nicolás - Gabriela Covelli
Cuando Nicolás Deanna murió, apenas tenía 24 años.
"No fue un error médico... no cumplió con un solo protocolo, no escuchó a su paciente, no escuchó a su mamá, ni a otro médico que, solo con escuchar cuáles eran los síntomas de Nicolás, le preguntó si no se podía tratar de un síndrome meníngeo. Incluso la radióloga le preguntó para qué pedía una radiografía, si el paciente tenía meningitis. Pero respondió 'el médico soy yo'", añadió.
Gabriela se enteró de todo esto recién en el momento del juicio oral y público, cuando todos los médicos y profesionales involucrados debieron declarar ante la Justicia.
"Te llevan tu hijo, te llevan tu alma, te llevan tu vida", afirmó en el programa Creo, que se emite cada mañana en AIRE.
Qué dice la Ley Nicolás
El diputado nacional Fabio Quetglas (UCR) fue uno de los autores del proyecto de la Ley Nicolás: "No solo trabajamos junto los familiares, sino también con profesionales de primer nivel como, por ejemplo, el Observatorio Argentino de la Seguridad del Paciente, dependiente de la UBA", afirmó en contacto con AIRE.
Según estudios internacionales, "el 80% de la calidad sanitaria depende de las capacidades del profesional, y el restante 20% de los otros factores que intervienen en la atención de un paciente. La incorporación de tecnología mejora la situación, pero también suele incrementar las posibilidades de errores en la interacción".
"En los Estados Unidos, donde existen estadísticas confiables sobre estos temas, la cuarta causa de muerte se produce por los errores médicos", resaltó el legislador.
Fabio Quetglas
Fabio Quetglas, diputado nacional (UCR).
Quetglas remarcó que se intentó alcanzar los consensos necesarios para lograr la aprobación de "la ley posible", y que el espíritu de la norma se sostiene sobre cuatro pilares esenciales:
- Creación de un Registro Unificado de Eventos Centinela (RUDEC): en casos en los que durante una práctica médica se respetan todos los protocolos, y aun así se produce una situación no prevista, el hecho deberá quedar registrado. "Actualmente estas situaciones no se denuncian, pero desde ahora deberá primar la transparencia. Pensemos en cuántas vidas se hubiesen salvado con el fentanilo contaminado, si los primeros casos sospechosos se hubieran denunciado", dijo el diputado.
- Creación de una Red Federal de Registros de Profesionales de la Salud (REFEPS), donde quedará registrado quiénes reciben sanciones disciplinarias. Esta información deberá ser de acceso público. Actualmente, médicos sancionados en una provincia, terminan ejerciendo en otras.
- La ley prevé certificaciones periódicas de las aptitudes de cada profesional de manera obligatoria. En estos momentos, en Argentina, alrededor del 25% de las especialidades cuentan con certificaciones. Estas certificaciones podrán estar en manos del Ministerio de Salud, de las diferentes sociedades científicas o de las universidades públicas.
- Será obligatorio adecuar los planes de estudio e incorporar la materia "Seguridad del paciente". Quetglas resaltó que "todos asumimos que la Medicina es algo bueno, pero no tenemos en cuenta que también puede ser riesgoso si no se tiene en cuenta la seguridad del paciente".
Otros puntos que plantea la ley apuntan al trabajo de los profesionales de la medicina:
- Instaurar una duración de los turnos y de las horas de trabajo del equipo de salud, que eviten su agotamiento físico o mental.
- Prever medidas de protección del equipo de salud para salvaguardarlos de toda violencia o intimidación ejercidas por razón de su labor.
Ley Nicolás - Mala praxis
- Determinar la asignación de tiempos protegidos remunerados a los fines de garantizar la capacitación del equipo de salud en contenidos asociados con la seguridad del paciente.
- Para contratar personal, las autoridades de las instituciones deberán consultar a la Red Federal de Registros de Profesionales de la Salud (REFEPS).
- La Red Federal de Registros de Profesionales de la Salud deberá realizar una estadística anual con los indicadores más relevantes a su cargo y presentar la misma al Ministerio de Salud de la Nación.
- En caso de verificarse una limitación de las condiciones psicofísicas de una persona perteneciente al equipo de salud, debe evaluarse el grado de capacidad laboral y las tareas que específicamente no podrán realizarse, para su posterior reasignación de trabajo en la misma institución.
La lucha de una madre, para que otros no pasen por lo mismo
Durante estos ocho años de lucha, Gabriela Covelli no solo impusló esta ley, sino que también creó la ONG Por la Vida y la Salud, donde otras familias que atravesaron situaciones similares encuentran ayuda y respuestas.
- ¿Por qué impulsaste esta ley y por qué la llamamos Ley Nicolás?
- Nicolás es mi hijo y falleció el 2 de noviembre de 2017 por una mala praxis médica. Y todo esto nace desde ese inmenso dolor que puedo jurar que es inimaginable e inexplicable, porque te llevan tu hijo, te llevan tu alma, te llevan tu vida.
Inicié una causa penal para para la condena del médico y empecé a encontrar un montón de puertas cerradas en mi cara, aun siendo abogada, conociendo las leyes.
Descubrí que nadie estaba controlando nada, que los Colegios de Médicos tampoco. Mientras avanzaba la causa penal, yo les pedía que abrieran un sumario, nada más, y que suspendieran de manera preventiva la matrícula. Porque les estaba mostrando que era un médico peligroso para otras personas.
gabriela Covelli Ley Nicolás 4
Gabriela y su lucha. Ahora, a través de una ONG que se llama Por la Vida y la Salud.
- ¿Por qué llegaron a la conclusión de que había sido un caso de mala praxis y de una muerte evitable?
-Voy a empezar diciendo que acá no hubo un error médico, sino un médico que despreció la vida de mi hijo, la vida de un chico que era un deportista de una salud intachable.
Un sábado a la noche comenzó a decirme 'Mamá, me duele la cabeza'. El tenía 24 años, no era un niño para que esté diciéndole a su mamá 'me duele la cabeza'. Tenía un dolor fuerte de cabeza. Tomó un ibuprofeno en ese momento. A la mañana siguiente me dijo que le seguía doliendo. Entonces, llamé a este médico, que es de una clínica privada y amigo de la familia.
Le dije 'Mirá, no me gusta este dolor de cabeza'. Uno conoce sus hijos y uno conoce sus formas. Y era un dolor de cabeza que realmente lo tenía como abombado a Nicolás.
Me mandó a tomarle la presión, la fiebre y me lo medicó con diclofenac por teléfono. Me mandó a que se hiciera masajes y yo conseguí una masajista un día domingo. A la tarde, el dolor de cabeza de mi hijo ya era insoportable.
Nicolás no estaba caminando bien y fui hasta la clínica, le pedí que por favor me atienda. Lo atendió y directamente lo inyectó por vía endovenosa con diclofenac y diazepam. Nicolás quedó dormido en una camilla.
Cuando despertó sus palabras fueron 'Gracias, me siento como en el paraíso'. Pero el dolor de cabeza que volvió a las dos horas. Ese mismo lunes a la mañana volví a llamar al médico.
Este este médico vio a mi hijo y yo estuve en una clínica durante 24 horas parada, pidiéndole que me derive a otro lugar, pero me derivaba a un quinesiólogo y uno cree.
Yo nunca pensé que un médico podía hacer esto. Yo insistí con un análisis de sangre, con una tomografía. Yo le decía que mi hijo tenía un tumor, y él me preguntó si yo era la Doctora Rímolo, que mi hijo estaba muy estresado, que tenía una contractura cervical, que fuera a respirar al mar, que medite. Y yo no entendía nada.
Gabriela Covelli Ley Nicolás 3
Nicolás siempre fue un deportista y gozó de buena salud. Sin embargo, cuando comenzaron a tratarlo por meningitis bacteriana, era demasiado tarde.
A las consultas yo iba con mi hijo, con su hermano y con mi hermana. Eramos tres que estábamos escuchando lo que decía el médico.
Y hasta que al final, cuando le hizo el análisis de sangre y la tomografía, vi que tenía más de 20.000 glóbulos blancos. O sea, tenía una infección severa y con la tomografía me dijo que se había una sinusitis mal curada y angina.
Volvió a inyectar a Nicolás, esta vez con penicilina. Me dio el alta, me mandó a mi casa... Nicolás hizo un vómito a chorro delante de él. Nicolás tenía una meningitis bacteriana y yo no llegué a otro médico, porque a Nicolás se le hincharon delante mío. Y el médico me decía que lo metiera en la bañera.
Desúés, lo subió a su auto. Teniendo un hospital a dos cuadras de mi casa, me llevó otra vez hasta la clínica de él, porque me dijo que me iba a derivar a Mar del Plata.
En ese momento tuvieron que llamar al hospital de Pinamar, vino una médica de guardia, yo ya estaba descompuesta atrás de una puerta, el papá de Nicolás estaba al lado de él y la médica se agarró la cabeza y dijo, '¿Qué hiciste? ¿Qué hiciste? Este chico tiene un cartel así que dice meningitis'.
Nueve días Nicolás estuvo intubado en Terapia Intensiva. A los médicos del hospital yo los he visto llorando, algunos detrás de una columna, hasta que el jefe de Terapia me dijo 'No puedo hacer nada por Nicolás. Lo único que puedo hacer es abrir la Terapia Intensiva y que entren todos sus amigos'.
Cien personas rezaron durante nueve días en el parque de ese hospital. Por eso te digo que no fue un error médico. Por eso te digo que él despreció la vida de mi hijo. No cumplió con un solo protocolo. No cumplió. No escuchó a su paciente, no escuchó a su mamá y no escuchó.
Hubo otro médico que, con solo escuchar los síntomas de Nicolás, le dijo: "¿No será un síndrome meningeo?". Y él le dijo, "No." Y una radióloga le dijo: "Doctor, ¿por qué le hace una radiografía? Este pibe tiene meningitis." Y le dijo: "El médico soy yo."
Y luego en el final, llamó un neurólogo y nunca me enteré, nunca me enteré de nada de esto que te estoy diciendo, hasta el día que se hizo la investigación penal y tuvieron que declarar los médicos. Yo escuché todo esto en un juicio penal.
Ley Nicolás - Gabriela Covelli 1
Durante años, familiares de víctimas de casos de malas praxis médicas reclamaron por una ley en el Congreso de la Nación.
- Gabriela, no sé si decirte gracias por tu relato o perdón por haber revivido todo esto.
- No, no, no. Esto lo cuento muchas veces y no me voy a cansar de contarlo, porque si contar la historia de mi hijo, aunque me duela, sirve para salvar otras personas, lo voy a hacer.
Porque con esto, los médicos tienen que entender. Cuando uno dice mala praxis se ponen a 220. Pero imagínense cómo me pone a mí nombrar la palabra mala praxis, que fue la que me hizo perder a un pibe de 24 años, que era el amor de mi vida.
- La ley salió. La ley se promulgó. ¿Cómo cómo te sentís frente a esto?
- Esta ley es un cambio de paradigma. El día que pude reponerme de este trompazo que me dio la vida, escribí en una foto de Nicolás: "Si tu vida derramó tanto amor, que tu partida sirva para salvar a otros".
Y comencé con esta ley. Una lucha de ocho años. Formé una ONG que se llama Por la de la Salud y La Vida, para los que nos necesitan.
La ley trata sobre la prevención y trata de un control del Estado. Nosotros no tenemos estadísticas y hay que sacar la basura de abajo de la alfombra. Hay que dejar de esconder estas cosas. Así que en esta ley que no es contra los médicos, todo lo contrario.
Entre otras cosas, prevé jornadas limitadas de labor para evitar el agotamiento médico, capacitación permanente, no de esas que regalan los laboratorios o los colegios de médicos.
Habrá un registro público de médicos que cometan mala praxis y sean condenados. Antes no aparecían más y si los inhabilitaban en una provincia, se iban a trabajar a otra. Así hizo (Aníbal) Lotocki. Si esta ley hubiera existido, quizás no hubiese habido tantas muertes por el fentanilo.