De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada seis personas que contrae meningitis bacteriana muere, y una de cada cinco sobrevive con secuelas permanentes, como sordera, convulsiones, trastornos neurológicos o amputaciones.
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Los grupos más vulnerables y la importancia de la prevención
El pediatra Fernando Burgos (M.N. 81.759), jefe de la sección ambulatoria del Hospital Austral, explicó, en diálogo con Noticias Argentinas, que “la meningitis suele manifestarse de forma intempestiva y sus síntomas pueden confundirse con cuadros más leves. Cuando la consulta médica se retrasa, el pronóstico se vuelve mucho más complejo”.
Los síntomas más comunes incluyen fiebre alta, dolor de cabeza intenso, rigidez de cuello, vómitos y somnolencia. En los bebés, puede presentarse como irritabilidad, llanto persistente, rechazo a la alimentación o hinchazón de la fontanela.
Según el Instituto Malbrán, el meningococo del serogrupo B sigue siendo el más frecuente en menores de un año, con el 95% de los casos confirmados en 2024. A su vez, los adolescentes son los principales portadores y transmisores, por lo que su vacunación resulta clave para evitar brotes.
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Día Mundial de la Meningitis: expertos advierten sobre la baja cobertura de vacunación
Vacunación insuficiente en el país
En Argentina, la dosis frente al meningococo aplicada a los 11 años apenas supera el 60% de cobertura, y en los menores de un año no llega al 80%, muy por debajo del 95% recomendado para lograr protección comunitaria.
Burgos fue contundente: “No se puede concebir que un niño muera de meningitis cuando existen vacunas para prevenirla. La vacunación temprana salva vidas”.
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En 2020, la OMS lanzó la hoja de ruta “Derrotar la Meningitis para 2030”, que plantea tres metas centrales:
- Eliminar las epidemias bacterianas.
- Reducir un 50% los casos prevenibles por vacunación.
- Disminuir un 70% la mortalidad.
Cumplir esos objetivos requiere trabajo conjunto entre los sistemas de salud, profesionales y comunidad, promoviendo concientización y acceso equitativo a las vacunas.
Los especialistas coinciden: consultar al médico y vacunar a los niños y adolescentes es la forma más efectiva de prevenir una enfermedad que puede dejar secuelas irreversibles o causar la muerte en pocas horas.
