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Esta masa no solo es perfecta para la tradicional tarta, sino que también puede usarse para una variedad de rellenos, desde carnes y verduras hasta opciones dulces. Además, el uso de aceite en lugar de manteca aporta beneficios nutricionales, como una mayor cantidad de grasas monoinsaturadas, que son beneficiosas para la salud cardiovascular. Al elegir aceite de oliva, se añaden antioxidantes y vitaminas adicionales, convirtiendo esta masa en una opción no solo deliciosa, sino también nutritiva.
El paso a paso para hacer masa de tarta pascualina con aceite en casa
A continuación, descubrí cómo hacer la mejor masa de tarta pascualina con aceite en la comodidad de tu casa, con la receta sencilla y práctica que te compartiremos.
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La masa para tarta pascualina se puede hacer en casa con aceite y otros ingredientes simples, como harina, sal y agua.
Ingredientes:
- 300 gramos de harina de trigo
- 80 ml de aceite de oliva (puede ser aceite de girasol para un sabor más neutro)
- 150 ml de agua
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de polvo de hornear
Preparación:
- En un bol grande, tamiza la harina junto con el polvo de hornear. Añade la sal y mezcla bien para distribuir uniformemente los ingredientes secos.
- Añade el aceite a la mezcla de harina. Utiliza una cuchara de madera o tus manos para integrar el aceite con la harina hasta obtener una textura arenosa.
- Poco a poco, agrega el agua a la mezcla. Es mejor hacerlo de a poco para evitar que la masa quede demasiado húmeda. Amasa con tus manos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados y la masa tenga una consistencia suave y elástica.
- Forma una bola con la masa y cúbrela con un paño limpio. Deja reposar a temperatura ambiente durante unos 30 minutos. Esto permitirá que la masa se relaje y sea más fácil de estirar.
- Divide la masa en dos partes iguales, una para la base y otra para la cubierta de la tarta. En una superficie ligeramente enharinada, estira una de las partes con un rodillo hasta obtener un círculo del tamaño deseado para cubrir el molde de la tarta.
- Coloca la masa estirada en el molde previamente engrasado o cubierto con papel manteca. Presiona suavemente para ajustarla a la base y los bordes del molde. Si es necesario, recorta el exceso de masa.
- Añade el relleno deseado (por ejemplo, espinacas y ricota) sobre la base de masa en el molde. Estira la segunda parte de la masa de la misma manera y colócala sobre el relleno. Une los bordes de ambas masas, sellándolos bien para que el relleno no se escape durante la cocción.
- Precalienta el horno a 180 °C. Hornea la tarta durante 35-40 minutos o hasta que la masa esté dorada y crujiente.
- Deja enfriar un poco la tarta antes de desmoldarla y servirla. Esto ayudará a que se mantenga firme y sea más fácil de cortar.
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