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Política Javier Milei | Guerra de Malvinas | Malvinas

Javier Milei cerró el acto por Malvinas al grito de "Viva la libertad, carajo" y resaltó la figura de Julio Roca

El Presidente no evitó la oportunidad de lanzar su clásica arenga y también elogió al ex mandatario, referente de la Generación del 80.

El presidente Javier Milei lanzó su ya clásico grito de “Viva la libertad, carajo” en el cierre del acto central en homenaje a los caídos y veteranos de la Guerra de Malvinas, ocasión en la que también destacó la figura del ex mandatario Julio Argentino Roca, referente de la Generación del 80.

En el Cenotafio de la Plaza San Martín, el mandatario resaltó a Roca y destacó el rol que tuvo en la "modernización" de la Argentina. Milei encabezó el acto por la Guerra de Malvinas y pidió inaugurar "una nueva era de reconciliación con las Fuerzas Armadas".

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Tras resaltar la figura del ex presidente y emblema de la Generación del 80, Milei aseguró que “no existe soberanía sin prosperidad económica y, como muestra toda la evidencia empírica, no existe prosperidad económica sin libertad económica".

Y añadió: “Nos hemos cansado de escuchar a lo largo de las últimas décadas políticos que se golpean el pecho defendiendo nuestro justo reclamo por las Islas, sin que tenga un solo resultado para mostrar después de todos estos años”.

Milei consideró que "para que los reclamos soberanos sean escuchados y respetados, es condición necesaria primero que el país y su dirigencia sea respetada, ya que nadie tomaría en serio el reclamo de defaulteadores seriales, corruptos o dirigentes políticos que más que una visión de país, lo que defienden es un modelo de negocios".

“Para que una nación soberana sea respetada en el concierto de las naciones hay dos condiciones esenciales que deben darse: esa nación debe ser protagonista del comercio internacional y también debe contar con fuerzas armadas capaces de defender su territorio frente a cualquiera que intente invadirlo. Nadie escucha ni respeta un país que sólo produce pobreza y cuyos políticos desprecian a sus propias fuerzas. Argentina, producto de la dirigente política de las últimas décadas, no ha cumplido con ninguna de esas condiciones", continuó.

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Y lanzó: “No es coincidencia que poco y nada se haya avanzado en el reclamo por nuestras islas: somos, después de décadas, el primer gobierno que se hace cargo de esta situación y que tiene un rumbo claro para ser un país realmente próspero y soberano”.

“No hay soberanía, respeto internacional por nuestros intereses si la dirigencia política hace hasta lo imposible para ensuciar el nombre de nuestras Fuerzas Armadas. En los años en los que se consolidó nuestra soberanía, las Fuerzas Armadas eran valoradas por el conjunto de la dirigencia y por la sociedad”, subrayó.

Si hacer mención al rol de Inglaterra, arremetió: “La política ha querido borrar ésto de nuestra memoria colectiva, hostigando y humillando a nuestras Fuerzas. ¿Qué reclamo por la soberanía es posible si la dirigencia de un país se dedica a menospreciar y hostigar a sus Fuerzas Armadas? ¿Qué homenaje a los héroes de Malvinas puede ser sincero si en simultáneo el Estado financia grupos y organizaciones que no hacen otra cosa que desprestigiar a nuestras Fuerzas?".

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Como cierre de su discurso, el jefe de Estado lanzó su reconocida arenga, ante funcionarios nacionales, jefes militares, veteranos y familiares de caídos en la Guerra de Malvinas: “Viva la libertad, carajo”.

Como cierre de su discurso, el jefe de Estado lanzó su reconocida arenga, ante funcionarios nacionales, jefes militares, veteranos y familiares de caídos en la Guerra de Malvinas: “Viva la libertad, carajo”.

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"A los héroes de Malvinas y a nuestras Fuerzas Armadas les digo que ese tiempo se ha acabado y ustedes son motivos de orgullo para nuestra nación y en esta nueva Argentina tendrán nuevamente el respeto que les ha sido largamente negado”, prometió.

En tal sentido, el presidente pidió inaugurar “una nueva era de reconciliación con las Fuerzas Armadas”.

Como cierre de su discurso, el jefe de Estado lanzó su reconocida arenga, ante funcionarios nacionales, jefes militares, veteranos y familiares de caídos en la Guerra de Malvinas: “Viva la libertad, carajo”.