menu
search
Policiales abuso sexual | Condena | juicio

Denunciaron a su padre por abuso sexual, fue condenado y podrán dejar de llevar su apellido

Un hombre de 65 años fue condenado a 10 años de prisión por el abuso sexual de dos de sus hijas, quienes pidieron a la Justicia dejar de llevar el apellido paterno.

La Justicia santafesina condenó a un hombre de 65 años identificado como Sergio G. a 10 años de prisión por el abuso sexual de dos de sus hijas. Las niñas, hoy adolescentes, y un hermano, se encuentran en una lucha legal para dejar de llevar el apellido paterno; tras la condena impuesta este lunes por los jueces Octavio Silva, Martín Torres y Pablo Spelkujak, ese anhelo está más cerca.

Sergio G. (su apellido se preserva por respeto a las menores) fue condenado como autor de abuso sexual gravemente ultrajante y por corrupción de menores, agravado por el parentesco y la guarda; además, ante el pedido de la querella, el tribunal dispuso que se corra a vista al Juzgado de Familia para que tramite la suspensión de la responsabilidad parental.

En caso de contar con el aval de este fuero, el trámite para dejar de llevar el apellido paterno, que fue avalado por la Justicia y apelado por el progenitor, estaría más cerca de ser favorable a las menores.

LEER MÁS ► Tres hermanos pidieron a la Justicia cambiarse el apellido tras denunciar a su padre por abuso sexual

Caso M Pañuelos Amarillos Abuso Sexual Infantil Santa Fe Tribunales

Condenado por el abuso sexual de sus hijas

La investigación penal por abuso sexual comenzó en abril de 2021, luego de la denuncia presentada por la psicóloga que asiste a una de las niñas; en el marco de una consulta, la menor, que entonces tenía 11 años, le refirió a la profesional diferentes situaciones de abuso sexual cometidos por su padre, cuando ella tenía entre los 5 y 9 años.

Además, la niña le dijo que nunca le había contado nada a nadie por miedo, ya que su papá le decía que no la iba a devolver a la mamá y que si él quería que ella y sus hermanos se quedaran con él una semana, podría hacerlo.

En tanto, la psicóloga también se contactó con la madre de los menores para ponerla al tanto de lo expresado por su hija. Al momento de declarar en el marco de la investigación, la mujer detalló que hacía varios años que estaba divorciada del padre de sus hijos, que los chicos lo visitaban cuando ellos lo deseaban, pero que no querían ir solos, siempre se acompañaban porque le tenían miedo.

Agregó que una de sus hijas la llamaba por la noche desesperada y le decía que la buscara; que cuando tuvieron celular, le mandaba mensajes a escondidas porque su padre no la dejaba hablar con ella. En esta declaración, precisó que sus tres hijos menores asisten a terapia psicológica y que la psicóloga fue quien la llamó para contarle que su hija había dicho que su papá la había abusado.

En la acusación presentada por la Fiscalía y la querella, se precisa que si bien las niñas nunca le contaron a su mamá ni a su hermana mayor los abusos que padecían, sí le contaron a sus primas que su padre les sacaba la ropa y las tocaba.

Las niñas fueron entrevistadas en Cámara Gesell; una de ellas detalló que la primera vez que su padre la tocó tenía 6 años, cuando sus padres se separaron y vivían en Rincón, pero que nunca se animó a contarlo porque le daba vergüenza y que esto sucedía cada vez que se veían.

La niña relató los abusos, agregó que a su hermana le pasaba lo mismo, que su padre las perseguía, ya que vive cerca de su escuela. En tanto, su hermana agregó que los hechos ocurrían en la casa de su papá cuando vivía en Rincón y luego en su nueva casa, en el centro de la ciudad de Santa Fe, y que pasaba todos los días en que se quedaban con su papá.

Por último, el hermanito, que tenía 8 años cuando fue entrevistado en Cámara Gesell, refirió muchas situaciones de violencia vividas de parte de su padre y que esto le generó problemas para dormir, sentía que hay alguien viniendo o miedo a que lo dejen en algún lugar en donde su mamá no lo pueda encontrar.

El juicio se realizó en los tribunales de Santa Fe durante los últimos días de noviembre; este lunes, Sergio G. fue condenado a 10 años de prisión como autor de abuso sexual gravemente ultrajante calificado por el vínculo y la guarda en concurso ideal con promoción a la corrupción de menores agravado por el vinculo y la guarda.

violencia de género.jpg

Cambio de apellido

Los adolescentes iniciaron la denominada acción de Cambio de Apellido para sustituir el apellido paterno por el materno, con patrocinio de los abogados Agustina Taboada y Matías Pautasso, quienes también los asisten como querellantes en el proceso penal; el pedido de cambio de apellido está fundamentado en razones profundamente personales y vinculadas a hechos de violencia y sufrimiento asociados al apellido paterno. En el proceso judicial, los adolescentes manifestaron que el apellido de su padre es asociado por ellos como algo "sucio", que les produce dolor y que no forma parte de su realidad actual.

Esta petición se presentó en noviembre de 2024 ante el Juzgado de Primera Instancia de Distrito en lo Civil y Comercial de la Undécima Nominación, en el contexto de la investigación penal iniciada en 2021 por delitos sexuales atribuidos a su padre, identificado como Sergio Omar G. (el apellido se preserva por respeto a los menores).

En este proceso judicial, los menores fueron escuchados por la Justicia; en la denominada audiencia de conocimiento personal, los adolescentes expresaron de manera clara y contundente su voluntad de cambiar el apellido, en ejercicio de su autonomía progresiva.

La sentencia judicial fue dada a conocer el 22 de septiembre de 2025: la jueza hizo lugar al pedido de los menores, y precisó que la oposición del progenitor carecía de sustento jurídico, ya que el derecho al nombre y a la identidad es un derecho personalísimo de los adolescentes y su ejercicio no puede ser condicionado por la voluntad del progenitor, "especialmente en un contexto donde existen denuncias graves en su contra".

Así se autorizó el cambio del apellido paterno por el materno, y se ordenó al Registro Civil realizar las modificaciones para inscribirlos sólo con el apellido materno. Sin embargo, el progenitor apeló esta decisión judicial por lo que, si bien los menores cuentan con la autorización judicial para el cambio de apellido, esta sentencia será revisada por la Cámara de Apelaciones.

En el veredicto resuelto este lunes, el tribunal condenó al acusado y además dispuso que se corra a vista al Juzgado de Familia para que tramite la suspensión de la responsabilidad parental. En caso de que esta suspensión prospere, la apelación presentada podría quedar sin efecto, y el cambio de apellido se haría efectivo sin dilaciones.