menu
search
Espectáculos California | dientes | Historia

Jimi Hendrix: 50 años del paso a la inmortalidad del mejor guitarrista de la historia

El 18 de septiembre de 1970, en Londres, falleció Jimi Hendrix, un revolucionario, guitarrista impecable, frontman provocador y un compositor peculiar. Otro del maldito club de los 27 años.

Un estilo inconfundiblemente negro y a la vez tan personal que era imposible no sentirse persuadido por su extravagante aspecto o su desmedida energía tan tierna por momentos y a veces, descarnadamente sexual: así era Jimi Hendrix, la mejor guitarra de la historia y un mito que, a 50 años de su muerte, sigue vivo.

La noción es única y las razones infinitas: “En muchos aspectos, modificó el sonido del rock mucho más profundamente que los Beatles. Sin duda, ellos aportaron composición al género, pero Jimi cambió el sonido de la guitarra”, afirmó Pete Townshend, miembro de The Who, sobre las razones de la jerarquía de Hendrix, mientras que el autor Jas Obrecht escribió que “según su estado de ánimo podía ser dulce, elegante, salvaje o sexual; a veces todo en una misma canción”.

image.png
 Jimi Hendrix, la mejor guitarra de la historia y un mito que, a 50 años de su muerte, sigue vivo.

Jimi Hendrix, la mejor guitarra de la historia y un mito que, a 50 años de su muerte, sigue vivo.

Nacido y criado en el seno de una familia muy modesta, Hendrix aprendió a tocar intentando emular o tocar por encima de los discos de R&B de su padre, como Bobby Womack o Curtis Mayfield, estilo del que mostró un gran conocimiento así como de todas las músicas negras, de B.B. King al “preblues” y las melodías gospel.

The Jimi Hendrix Experience - All Along The Watchtower (Official Audio)

Los inicios de Jimi Hendrix en la música

Comenzó a dedicarse a la música como acompañamiento de otros artistas y tocó junto a leyendas como los Isley Brothers, Sam Cooke o Little Richard, quien lo terminó despidiendo por no llegar a la hora del colectivo que los llevaría de la gira, no sin antes haberle mostrado cómo conseguir la atención total del público durante una actuación.

Como él, Hendrix se convirtió en un animal de escenario, no solo por sus extravagantes vestuarios (de él dicen por ejemplo que fue “hippy” en Londres cuando el malogrado vocalista de los Stones Brian Jones aún vestía trajes), sino también por su manera de tocar y retorcerse.

The Jimi Hendrix Experience - Foxey Lady (Miami Pop 1968)

En sus actuaciones, no solo era capaz de conseguir un volumen endiablado, sino de tocar las cuerdas con los dientes, por detrás de la espalda o entre las piernas.

Cuando Hendrix comenzó a ser reconocido, la guitarra eléctrica era algo relativamente nuevo. Contribuyó a arrancarle nuevos sonidos y poner en práctica técnicas inéditas, con resultados llenos de filigranas como las de “Little Wings” o “Angel” o con su dominio del “bending” (tocar una cuerda y tirar de ella hacia arriba o abajo cuando comienza a emitir la nota para obtener un sonido más agudo).

“Pero lo más importante sobre su forma de tocar era el alma que le ponía. Era como si estuviese en contacto con el cosmos. Muchos guitarristas actuales tocan muy rápido para impresionarte, pero cuando intentas recordar lo que han tocado, no puedes. Con él, lo mejor era que siempre podías tararear sus solos en la cabeza, porque eran muy melódicos”, destacaba Randy Wolfe, alias Randy California, miembro en 1966 de su banda Jimmy James And The Blue Flames.

The Jimi Hendrix Experience - Voodoo Child (Slight Return) (Live In Maui, 1970)

Pese a que era zurdo tocaba siempre con guitarras para diestros (normalmente del modelo Stratocaster) las daba vuelta, invirtiendo la cejilla y reordenando las cuerdas a la manera habitual, con las más finas en la parte inferior.

Hendrix dejaría una colección de canciones inéditas y versiones a las que dio un toque particular que se convirtieron en históricas, como el clásico “Hey, Joe”, el éxito de Bob Dylan “Like A Rolling Stone” o el himno americano, “The Star-Splangled Banner”, con la que cerró de manera brutal el festival de Woodstock de 1969. Un año más tarde, un 18 de septiembre de 1970, sobrevino su muerte accidental por sobredosis.