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Sociedad

Ustedes que pueden: la historia de la pareja santafesina que vendió todo y se fue a recorrer América

"Ustedesquepueden" es la cuenta de Instagram que armaron Nazaret y Emiliano y que refleja parte de su sueño cumplido. El nombre refiere a esa frase que desde un principio escucharon de conocidos: "Ustedes que pueden" háganlo. Así fue: recorrieron parte de América durante un año y medio.

En octubre del 2020, Nazaret Cornaglia (32) y Emiliano Demarco (30) tomaron la decisión de vender todo lo que tenían y emprender un viaje. No fue fácil porque tenían ganas pero también miedos e incertidumbre. En las mochilas metieron esas tres cosas, algunas más y se fueron. "Qué suerte... Ustedes que pueden" les decían los conocidos. Así se llama la cuenta de Instagram que armaron para volcar el viaje completo en la red social. Pero ambos están convencido de que en realidad, para viajar solo basta con proponérselo.

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Nazaret es licenciada en Recursos Humanos y diseñadora de indumentaria. Emiliano es actor y le quedan algunas materias para recibirse de psicólogo. Al momento de irse, ambos estaban trabajando formalmente y con perspectivas de crecimiento.

Uno se pregunta cuándo se te ocurre una idea de ese tenor que hasta puede ser descabellada. En el caso de estos flamantes viajeros, Emiliano tiene la respuesta. "Primero hubo crisis y después peleas, pasamos por etapas complicadas. Le mandé un link a Nana ( Naza) de una parejita que viajaba por el mundo y le digo ¿'Que pensás'?. Así nació todo"."Teníamos la casita, el auto y lo siguiente era o casarse, o tener un hijo o un perro o esto", agregó Nazareth en diálogo con Geraldine Brezán y Julián Brochero en el programa 7 AM por Aire.

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Desde su Santa Fe natal donde regresaron el 25 de junio del 2022 cuentan la experiencia como algo maravilloso pero que tiene sus complejidades. La primera de ellas apareció en la noche inaugural que pasaron como viajeros. Fue en Bacalar, México y Nana no lo olvida. "Llegamos a Bacalar y dormimos ahí, no fue todo tan como lo habíamos imaginado. Dormir en una cama que no es tuya, en la oscuridad. Hubo miedo incertidumbre y arrepentimiento", relató la entrevistada.

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"Pero viajamos un año y medio y ahora pensamos por qué no lo hicimos antes. Cuando uno vuelve parece que otra vez te volvés animal de costumbre", aclara Emiliano quien se plantea que no soporta pasar un día sin una ducha caliente.

Para el inicio accedieron a la primera herramienta que les permitiera conseguir un lugar de base. Conocieron el voluntariado. Es un intercambio de tiempo por hospedaje y comida. Se trata de hacer jardinería, trabajar en una recepción, o como bartender a cambio de hospedaje, comida y hasta a veces dinero de por medio.

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Así comenzó el viaje para Naza y Emi en uno de los sitios más complicados como es centroamérica. "Uno cree que Argentina es un país subdesarrollado pero ese lugar es el centro del subdesarrollo. Es agotador moverte mochileando por Centroamérica", expresó Emiliano quien está seguro de que es más conveniente arrancar viajando por el primer mundo: Europa o Estados Unidos.

Venciendo todos los obstáculos posibles fue que se quedaron un año y medio recorriendo lugares paradisíacos. Viviendo de prestado, con austeridad y con lo estrictamente necesario para subsistir. Hasta que un día sintieron la necesidad de volver. Extrañaban sus afectos, tener una cama y una ducha caliente... sobre todo Naza. Volvieron de sorpresa porque así lo habían pactado.

Nazaret y Emiliano viajan por el mundo

El 25 de junio bajaron en un colectivo en la terminal de ómnibus de Santa Fe y -caminando porque no tenían dinero- llegaron hasta la casa más cercana. La del padre de Emiliano que vive en pleno centro, sobre calle Mendoza. Estaba tan sorprendido de verlos que ni siquiera atinaba a abrirles la puerta para que puedan entrar. Lo propio les pasó con la familia de Nazareth.

Están en Santa Fe pero a meses de buscar su próximo destino: Estados Unidos. En octubre partirán nuevamente, convencidos de que la experiencia es enriquecedora. Lo más fuerte que les dejan los viajes son los lazos, los contactos con las personas y la posibilidad de ser ejemplo para que otros puedan animarse... Vamos "Ustedes que pueden".