Después de más de 17 años de historia, la Feria Popular Alberdi de Santa Fe cerrará definitivamente sus puertas este viernes 31 de octubre, tras la decisión de la Municipalidad de no renovar el contrato de alquiler del inmueble ubicado en Rivadavia 2747, entre Eva Perón e Irigoyen Freyre.
El espacio —que se convirtió en un emblema del comercio popular local— nació en mayo de 2008 como una alternativa para los vendedores informales del Parque Alberdi, desplazados durante las obras de remodelación y construcción de cocheras subterráneas. Desde entonces, funcionó de manera ininterrumpida y llegó a albergar casi 40 feriantes, aunque en la actualidad solo 17 familias mantenían sus puestos en el predio.
La Municipalidad de Santa Fe decidió no renovar el contrato de alquiler y la Feria Alberdi cerrará sus puestas este viernes.
El cierre definitivo responde al vencimiento del contrato y la decisión del Ejecutivo de no continuar afrontando los casi 4 millones de pesos mensuales que implica el alquiler, en el marco de una política de reorganización de los recursos municipales.
Poletti remarcó que no se trata de un castigo ni de una medida aislada, sino de una decisión enmarcada en un esquema más amplio de ordenamiento. “Es importante que se comprenda que esta medida es un paso hacia una gestión más eficiente y ordenada de los recursos de todos los santafesinos”, afirmó.
El destino de los feriantes
Consultados por AIRE, desde el Ejecutivo municipal señalaron que la situación “se encaminó” en los últimos días, a partir de distintas gestiones con los puesteros y el ofrecimiento de alternativas de acompañamiento y reubicación.
En ese sentido, se les propuso trasladarse a otras ferias populares de la ciudad, integrándose a los espacios ya existentes en distintos barrios y paseos. Algunos feriantes aceptaron la propuesta, mientras que otros decidieron trasladar sus puestos a sus viviendas para continuar sus ventas a través de canales digitales y redes sociales.
La Municipalidad destacó que el objetivo fue brindar herramientas para que cada familia pueda sostener su fuente de trabajo, en un marco más equitativo con respecto al resto de los feriantes de la capital provincial.