Crece la preocupación por el desmoronamiento de la barranca del río Colastiné. Ya son tres las viviendas afectadas y los vecinos advirtieron que el peligro no cesó. El último derrumbe ocurrió este martes durante la madrugada, cuando el agua se llevó más de cinco metros del terreno de otra casa de Colastiné Norte, dejando a la vista las columnas de cemento que sostenían la base de un mirador.
El derrumbe se extendió hacia el sur del terraplén Garello.
"Ya son tres las casas afectadas. El dueño de la última casa tenía una costa muy bien hecha. Había una verja, trataba de mantenerlo, pero se hizo imposible", indicó Alejandro, un vecino del barrio, en diálogo con el móvil de AIRE.
Los derrumbes comenzaron durante la madrugada sábado a la altura del kilómetro 3,3 de la Ruta 1, a pocos metros de una toma de agua y del terraplén Garello y, en menos de 12 horas, el río Colastiné se llevó el patio de más de diez metros de una vivienda, un quincho y hasta una pileta.
"En una de las casas había una piscina que estaba a 15 metros de la costa. Con el desmoronamiento cedió y quedó flotando. Traté de sostenerla y evitar que se caiga, pero no pude porque estaba arriba de la canoa", explicó Alejandro.
Cuatro días después del primer hecho, los vecinos indicaron se trató de una "situación repentina" y advirtieron que el peligro de derrumbe no cesó. De hecho, uno de los propietarios afectados decidió mudarse ante el temor que los deslizamientos afecten la estructura de la vivienda.
En diálogo con AIRE, Marcela Reynares, directora Provincial de Obras Hídricas de Santa Fe, pidió a la población que no se acerquen a la zona porque “no es un sector seguro” y existen posibilidades de que continúe el desmoronamiento. En tanto, aclaró que esas viviendas están por fuera de la defensa e instaladas en una zona de riesgo.
“En ese lugar hay una curva del río. Es esperable que erosione ahí y se generen estos derrumbes. El río actúa y erosionar las márgenes. Es un proceso natural. En este momento está en un proceso de bajante pronunciada y lo que favorece que se produzcan estos procesos”, comentó.
Reynares no pudo responder si estas viviendas tenían el permiso correspondiente, ya que esto depende de la Municipalidad de Santa Fe, aunque aclaró que lo ideal es que estos terrenos no se urbanicen debido a que se trata de un sector de riego.
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