“Las experiencias que se vieron este 2023-2024 nos sorprendieron, porque no es la dinámica común de la enfermedad. Las epidemias con números abruptos de casos se presentaban cada tres o cinco años”, sostuvo en diálogo con AIRE, María Soledad López, doctora en Ciencias Biológicas e investigadora de Conicet.
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María Soledad López, es doctora en ciencias biológicas e investigadora de Conicet.
Una investigación en la que participó López, analizó las temperaturas óptimas para la transmisión del virus del dengue por Aedes aegypti y determinó que el 70% de las de las ciudades capitales de Argentina las incrementaron en los últimos 30 años.
El estudio sostiene que el clima genera el escenario ideal para que las epidemias se sigan produciendo, de manera más frecuente y de mayor incidencia. “No hay que descansar en eso. Estamos pensando que no vamos a poder tomar acciones que minimicen estas epidemias, porque no es así”, destacó la doctora.
Cómo ayudan las altas temperaturas en la replicación del virus del dengue
Tanto la reproducción como la replicación del virus en el interior del mosquito dependen de la temperatura.
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A mayores temperaturas se replica más rápido el virus dentro del insecto y el mosquito es infectivo más rápido. Cuando un mosquito pica a una persona infectada, no es capaz de transmitir inmediatamente la infección a otra persona, sino que tienen que pasar una serie de días en los cuales el virus se replica en el cuerpo del mosquito hasta que puede picar a otra persona y transmitir el virus.
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A mayores temperaturas se replica más rápido el virus dentro del insecto y el mosquito es infectivo más rápido.
María Ramírez/Min. Salud Santa Fe
En el caso de que se registren temperaturas altas, este periodo también en el cual el virus se replica en el interior del mosquito también se acorta.“Un mosquito puede transmitir más veces el virus o se puede volver más rápidamente infectivo a temperaturas más altas”, afirmó la investigadora.
Cómo es y cuánto dura el ciclo del mosquito
López descartó que el comportamiento del mosquito, y explicó que la cantidad de insectos que se vieron esta temporada fueron consecuencia de las altas temperaturas que se registraron hasta abril. “Hay más mosquitos porque su ciclo reproductivo depende de la temperatura, entonces se acorta”, afirma la investigadora.
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El mosquito hembra pone huevos en recipientes que contienen agua, por eso es tan importante no tener recipientes con agua en los domicilios. Estos huevos se transforman en larvas que pasan por diferentes estadios que se extienden entre 5 a 10 días dependiendo la temperatura.
A mayor temperatura, el periodo que va de huevo a mosquito adulto es más corto y a menores temperaturas el ciclo se alarga. “Por eso cuando tenemos altas temperaturas nacen más rápido y hay mayor abundancia de mosquitos también” explicó López.
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La cantidad de insectos que se vieron esta temporada fueron consecuencia de las altas temperaturas que se registraron hasta abril.
El año pasado se observó que en provincias del norte de Argentina no se cortó la circulación autóctona del virus. Esto no pasó en Santa Fe, en donde la estación epidemiológica fue más larga y terminó en junio, o sea en la semana epidemiológica 23.
"Es algo que nunca había pasado en la provincia de Santa Fe. Si se extendió la estación epidemiológica, pero se cortó en el invierno, y eso es una buena señal", sostuvo López que destacó que esta temporada la situación se repite en varios aspectos, si las temperaturas siguen bajando, la transmisión autóctona volverá a cortarse.
Otro factor que López puso sobre la mesa es el hecho de que el 2023 fue el año más cálido del planeta, esto también pudo haber influido en que la extensión de la estación epidemiológica del año se alargue.
"Eso habla de que todavía seguimos siendo una zona epidémica y no endémica de transmisión. Esto va a depender de las temperaturas que en el planeta están aumentando progresivamente en los últimos 30 a 60 años", detalló.
