Se trata del celular IPhone que era propiedad de la víctima y el cual fue aportado la semana pasada por una de las partes que interviene en el caso que se tramita en la Fiscalía de Homicidios del Ministerio Público de la Acusación.
Según indicaron a AIRE fuentes allegadas la causa, el teléfono se encontraba en casa de la pareja del principal sospechoso, Augusto Joaquín Monzón, y fue hallado cuando la mujer hacía una mudanza de su domicilio al norte provincial.
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La hipótesis del crimen del arbolito
El caso remonta al 21 de febrero, cuando la víctima fue hasta el local California Bay de San Martín, casi Eva Perón, en horas de la siesta. La hipótesis principal de la Fiscalía, apunta a que allí se encontró con Monzón y este lo mató a golpes en la cabeza y escondió el cadáver en un depósito del comercio dedicado a la venta de ropa.
Luego huyó con una bolsa en mano, pasadas las 15 horas.
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Peritos e investigadores de la PDI fuera del local donde encontraron a Pelusa.
Dos días después, la policía se hizo presente en el local, a partir de la investigación por el paradero de Farías, y halló el cuerpo debajo de unas bolsas que contenían ropa.
De la escena del crimen, los peritos levantaron un morral de Farías con algunos dólares y elementos que podrían haber sido utilizados para la faena criminal. Sin embargo, no encontraron su teléfono, con el cual, un rato antes de ingresar al local, se comunicó con sus familiares para decirles que tenía “un negocio grande”.
Por qué puede ser clave para esclarecer el homicidio
Se cree que en el teléfono de “Pelusa” Farías podría estar algún elemento que potencie, aún más, la hipótesis que tiene tanto el fiscal del caso, Estanislao Giavedoni, como la querella, a cargo de Martín Risso Patrón que representa a los familiares del fallecido.
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El detenido al salir de la Policía de Investigaciones (PDI).
Dicha hipótesis apunta a que Monzón cometió el homicidio para facilitar el robo de dinero y de pertenencias que la víctima tenía consigna, o para lograr su impunidad. Por esa razón, la Fiscalía le imputó al único detenido el delito de homicidio criminis causa.
Los investigadores, de igual manera, no descartan que pueda surgir en el teléfono recientemente aportado a la causa algún nuevo elemento que conduzca a otro posible móvil del asesinato de Farías.
La caja fuerte de Pelusa
La causa, por otro lado, derivó en los últimos días en la apertura de la caja fuerte que tenía el fallecido Farías en una mutual de calle Tucumán, casi 25 de Mayo.
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Aquella caja fue descubierta a partir del hallazgo de una llave que se encontraba dentro del morral que el arbolito tenía al momento del crimen y la cual hallada por los peritos de la Policía de Investigaciones al inspeccionar la escena del hecho.
Tras examinar la llave, los investigadores detectaron que era de una caja fuerte que el arbolito poseía en una mutual del microcentro santafesino. La misma fue abierta el pasado 5 de marzo y del interior los agentes de la PDI, extrajeron miles de dólares estadounidenses, más de un millón de pesos y miles de euros.
Ante el hallazgo, el fiscal Giavedoni derivó el procedimiento a la Justicia federal y por turno le tocó al fiscal Gustavo Onel quien deberá definir próximamente qué medida tomar con el hallazgo de dinero que había en la caja.