Un hombre identificado como Cristian Eduardo Acosta quedó en prisión preventiva en el marco de la causa que investiga la violenta entradera ocurrida en la vivienda del futbolista Droopy Gomez. El sospechoso declaró en la audiencia de medidas cautelares y brindó una versión con la que intentó despegarse del robo.
El pedido de prisión preventiva fue realizado por el fiscal en turno el día del hecho, Esteban Morales, y ahora la causa será remitida a otra Fiscalía. Acosta es defendido por los abogados particulares Sebastián Oroño y Luciano Maidana.
La audiencia de prisión preventiva fue presidida por el juez José Luis García Troiano, quien dio por acreditada la hipótesis fiscal, la participación del imputado en los hechos y los riesgos procesales, y dispuso que Acosta permanezca detenido mientras avanza la investigación.
Violenta entradera
El robo ocurrió la madrugada del 24 de marzo, cuando “cuatro o cinco personas”, según la declaración de la víctima, saltaron el tapial del patio de la vivienda ubicada en Arroyo Leyes, y a punta de pistola amenazaron a la mujer, sus hijos menores y su madre. Los moradores fueron maniatados y encerrados en uno de los dormitorios, mientras los malvivientes revolvían la casa buscando “armas y dinero”.
La banda de ladrones se retiró en el vehículo Jeep Renegade de la familia, y se llevaron elementos de valor, dinero en efectivo, joyas, y hasta el cachorro de dos meses de los hijos de la familia. El hecho quedó registrado por las cámaras de vigilancia que fueron aportadas a la investigación. Al momento de declarar, la mujer brindó la descripción de uno de los implicados, y sostuvo que podía reconocerlo y reconocer las voces.
Acosta fue detenido una hora y media después del robo, cuando personal policial divisó el Jeep Renegade sustraído en el hecho. El conductor ingresó en una vivienda ubicada en Gobernador Freyre al 8400 donde se logró su detención; dentro de la vivienda había otras cuatro personas y de la requisa no se encontró ninguno de los elementos robados.
Al finalizar la audiencia, el fiscal Morales explicó desde el móvil de la radio en tribunales que aún se trabaja por precisar la identidad de los otros involucrados y si les cabe algún tipo de responsabilidad a quienes estaban presentes en el inmueble. También precisó que aún no se pudo recuperar nada de lo sustraído, y se desconoce el paradero del cachorro.
Acosta fue imputado como coautor de robo doblemente calificado, por ser cometido con un arma de fuego no habida, y por ser cometido en poblado y en banda. Previo a la imputación, el sospechoso fue reconocido por la víctima en rueda de reconocimiento de personas, que realizó en llanto, como precisó Morales para sostener la existencia de riesgos procesales y la necesidad de que Acosta continúe detenido.
“Me fueron a buscar”
A su turno, Acosta dio su versión de los hechos; el hombre sostuvo que estaba en su casa junto a su pareja, su hijo y un amigo, y que lo fue a buscar una persona “a la que le debía plata” para que vaya a buscar el Jeep a Rincón. Esta persona, junto a otros dos, llegó a bordo de un Bora blanco y lo llevaron hasta el ingreso a la localidad costera. El imputado relató el recorrido que hizo desde el ingreso a Rincón hasta la vivienda donde finalmente fue detenido, y sostuvo que “nunca ingresé armado a ninguna casa”.
Tras esta declaración, los defensores intentaron bajar la calificación de robo a un hecho de encubrimiento, con lo que la pena es menor y podría transitar el proceso en estado de libertad. Sin embargo, al momento de resolver, el juez entendió que ninguna evidencia en la causa permite avalar la versión del imputado, y recordó que además fue reconocido por la víctima en rueda de personas.
Finalmente, García Troiano dio por acreditado el hecho tal como fue atribuido por la Fiscalía, la posible participación de Acosta en el robo y los riesgos procesales, y dictó la prisión preventiva del sospechoso.
Audio ► la palabra del fiscal Morales desde el móvil en tribunales
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