El suceso ocurrió el martes, cuando Gabriela y su marido llegaron a la zona céntrica de la capital provincial. La mujer se fue a trabajar, mientras que el hombre estacionó su Fiat Duna en Rivadavia e Hipólito Irigoyen, cerca de las 8.30, porque tenía un trámite médico.
Solo pasaron diez minutos para que el dueño del auto vuelva y se encuentre con que el vehículo había desaparecido.
Ante la sustracción, el matrimonio decidió realizar la denuncia y doce horas después, policías lograron ubicar su vehículo en zona del barrio Villa Hipódromo. El mismo se encontraba abandonado en una calle, sin su batería, el radiador y el depósito del líquido refrigerante.
“El auto tiene un montón de faltantes, como que lo estaban desarmando de a poco”, comentó al respecto Gabriela a AIRE. “A mi marido le dijo una señora que vio un chico a la tarde que sacaba la batería”, agregó.