El fiscal federal N°2 de Santa Fe, Walter Rodríguez, rechazó el pedido para que se declare la incompetencia en la causa que investiga por encubrimiento a la fiscal del Ministerio Público de la Acusación, Cristina Ferraro. La misma está bajo la lupa de la Justicia por su desempeño en la custodia de la escena del crimen del empresario Hugo Oldani, asesinado el 11 de febrero pasado en la galería Rivadavia, de donde se estima desapareció una millonaria suma de dinero en pesos y dólares. Dicho dinero, se estima que era parte de actividades clandestinas que se llevaban a cabo en la agencia de Turismo Oldani S.R.L, la cual según sospecha el fiscal Rodríguez, era una "cueva financiera".
El reciente planteo judicial surgió luego de que la defensa que asiste a Ferraro, a cargo de Néstor Oroño, le pidió al juez Marcelo Bailaque -el pasado 1 de octubre- que declare la incompetencia de la Justicia federal tras sostener que el fiscal Rodríguez no puede atribuirle a su defendida un encubrimiento sobre el delito de "intermediación financiera no autorizada" el cual no era investigado el día que mataron a Oldani.
Vale recordar, que el estado de sospecha sobre la fiscal Ferraro comenzó a raíz de una serie de testimonios que indicaron que la funcionaria judicial autorizó a la hija y yerno del empresario asesinado poder sacar del local de la firma una suma de dinero que se encontraba en estanterías y que oscilaría los U$D 1.100.000 dólares estadounidenses y $3.050.000 pesos. Dicho dinero, no fue contabilizado por los peritos de la Agencia de Investigación Criminal por lo que nada más se supo sobre semejante caudal de billetes. Por esa razón, el fiscal Rodríguez le achaca a Ferraro -sin aún pedir la indagatoria- haber cometido un posible "encubrimiento agravado en la modalidad de hacer desaparecer rastros, pruebas o instrumento del delito".
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El fiscal Rodríguez argumentó en este sentido que el delito precedente al encubrimiento "registra un interés federal por obstrucción del buen funcionamiento de una institución nacional y genera, a su vez, un impacto regional por fuera de los límites de la provincia de Santa Fe".
A su vez, pidió el rechazo de la pretensión de Oroño tras aclarar que existe una investigación en curso en la actualidad que apunta de lleno a la intervención de terceras personas y no al fallecido Oldani, que obviamente queda apartado de cualquier tipo de acción penal.
Por la custodia de la escena del crimen, existe además una investigación que se tramita en el área de Delitos Complejos del Ministerio Público de la Acusación, a cargo de las fiscales del Mariela Jiménez y Laura Urquiza. En esa pesquisa, fueron imputados el Subcomisario Pablo Molinas, que se desempeña como Coordinador de la Escena del Delito de la División Científica Forense -Región I-; el Jefe de la Primera Zona de Inspección, Julián Nizzo; y el Exjefe de Orden Público de la Unidad Regional, Alejandro Amatti.
Mientras que en la causa que investiga el homicidio del comerciante, hay cuatro personas detenidas con prisión preventiva: Brian Nahuel Damiani (sindicado como el campana de la banda), Juan Manuel Ruffino (el chofer); Bruno Figueroa (acusado de concretar el homicidio; y la menor de edad cuya causa transita en la Justicia de Menores de Santa Fe.
Aquella investigación supo estar bajo la conducción de la fiscal Ferraro desde su inicio pero seis meses después del hecho, por disposición del fiscal regional, Carlos Arietti, el legajo fue reasignado al fiscal Gonzalo Iglesias.
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