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Según la causa judicial, la mujer y Abregú habían ido a jugar un partido de fútbol y luego regresaron a la casa del amigo, donde consumieron alcohol. Poco después, Ybarra ingresó al domicilio, intentó separar a la pareja y desató una violenta pelea.
El imputado sacó un cuchillo (chichillo) y apuñaló a Abregú en el tórax, provocándole una herida de cinco centímetros. Además, golpeó también a su pareja. Tras el ataque, Ybarra llevó a Flavia a la cama y limpió cuidadosamente las manchas de sangre para borrar pruebas en la escena del crimen.
Actualmente, Ybarra está imputado por homicidio y podría recibir una condena de hasta 25 años de prisión. Sin embargo, la causa sigue abierta a la espera de pericias psiquiátricas que podrían determinar si actuó bajo un estado de emoción violenta, lo que podría reducir su condena.
Un hombre asesinó a su mejor amigo, limpió la escena del crimen y podría afrontar una pena de 25 años de prisión por el homicidio.
Un hombre asesinó a su mejor amigo, limpió la escena del crimen y podría afrontar una pena de 25 años de prisión por el homicidio.
Contexto y repercusiones del caso
Este hecho estremeció a la comunidad local por su brutalidad y por la relación cercana entre víctima y agresor. El crimen no solo abrió un debate sobre la violencia de género y los límites de la violencia pasional, sino también sobre las consecuencias legales que puede tener actuar bajo una fuerte conmoción emocional.
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