Durante la cuarentena, casi ningún club o institución estuvo exento de los numerosos robos que sucedieron en la ciudad de Santa Fe. Esta vez le tocó al club de La Salle Jobson en Cabaña Leiva, de donde se llevaron más de 50 pelotas fútbol, redes, herramientas, botiquines, una docena de sillas de plástico, luces led, cuellos ortopédicos y hasta una silla de ruedas que había sido donada. Luego, como si todo lo anterior fuera poco, los delincuentes intentaron prender fuego el lugar.
El robo fue entre las 6 y las 8 de la mañana de este jueves y para ingresar rompieron las puertas. Además, provocaron destrozos en el vestuario y en el sector de equipamiento. También se llevaron la bomba centrífuga de la cisterna, por lo que está todo inundado ya que salió agua sin control durante varias horas.
José Luis, el encargado de la cantina del lugar, habló con Ignacio Laurenti en el móvil de Aire de Santa Fe y aseguró que "es imposible que haya sido una sola persona la que se lleve todo esto. Fueron más de tres, seguro, y evidentemente estaban en un vehículo. Los bolsones de pelotas son de casi dos metros, con 10 pelotas cada uno, es imposible que los carguen a pie", describió.
El entrevistado estimó que los ladrones robaron aproximadamente 40.000 pesos en mercadería de la cantina. En cuanto al resto del botín, dijo que "es incalculable el monto de lo que se llevaron: cada pelota sale 3.000 pesos", ejemplificó y agregó que "tumbaron las puertas de hierro macizo, que no sirven más, el robo fue total, no quedó nada".
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El cantinero es vicepresidente de la vecinal de Cabaña Leiva y asegura que desde la institución vienen solicitando a las autoridades más seguridad en toda la zona: "Con la gestión municipal anterior no tuvimos suerte, esperemos que esta nos acompañe un poco más. Justo pasó esto de la pandemia, pero estamos muy expuestos", concluyó.
Mirá el móvil de Ignacio Laurenti en el lugar
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