Pedazos de cobre muy pequeños, de no más de 30 centímetros de largo, son el elemento deseado por los amigos de lo ajeno en algunos barrios de Santa Fe. Barranquitas y Roma son las zonas afectadas por el robo en medidores de gas domiciliario que, al ser denunciados por los vecinos, en lugar de una respuesta sobre la seguridad del barrio, la empresa Litoral Gas les puso cepo y los dejó sin servicio.
Vecinos de ambas barriadas de Santa Fe dieron aviso a AIRE de lo que sucedió este fin de semana.
En Barranquitas, el caso de Aurora
Aurora tiene casi 90 años y vive en Pedro Zenteno al 3.300 del barrio Pro Adelanto Barranquitas. Este fin de semana se levantó para desayunar como lo hace cada mañana pero no había gas. Aún este lunes por la mañana le costaba contener las lágrimas de impotencia.
"Me robaron los caños, me levanté a la maña a y no tenía gas. Dejaron todo abierto, casi nos asfixiamos. Vino el del gas y se llevó el medidor", contó la mujer al móvil de Bruno Ballesteros para el programa Ahora Vengo que se emite por Aire de Santa Fe.
El presidente de la vecinal Alfredo Penisi apuntó que en las últimas horas hubo entre cuatro y cinco viviendas que sufrieron el robo de medidores de gas sólo en Pro Adelanto Barranquitas. Apuntó no sólo a la inseguridad sino también a la actitud de la empresa Litoral Gas, concesionaria del servicio de gas domiciliario en Santa Fe, por haber interrumpido el suministro a los usuarios damnificados por los robos.
"No entendemos cómo no le dejan ni una nota, una persona grande, jubilada con este problema. La verdad que es terrible. ¿Quién cubre los costos? No entendemos cómo no dejaron una notificación", se quejó Penisi, quien prometió ponerse en comunicación con la firma. "Es todo burocracia", apuntó.
"Escudo humano" en barrio Roma
Tres vecinos de barrio Roma contaron sus historias de robos de medidores, todos hechos delictivos ocurridos este fin de semana. En una entrevista con el móvil de Ignacio Laurenti, Viviana contó cómo se tuvo que transformar en "escudo humano" para proteger el medidor y que Litoral Gas no corte el servicio luego de sufrir el robo de las válvulas.
"Ayer me puse delante de la cabina de gas porque no quería que me lleven el regulador porque mi mamá está en silla de ruedas, ¿cómo hago para bañarla?", explicó la mujer, quien no pudo evitar el corte del suministro por parte de los inspectores.
La mujer contó que "poner en regla esta situación sería costoso" ya que "es una casa con más de 50 años de construcción" y su madre " es jubilada". "Nos obligan a ir por izquierda, es así", se lamentó la mujer.
Se le sumó Cecilia, otra vecina del barrio, quien relató lo que le sucedió a ella y su familia: "Queríamos reclamar que ayer nos hicieron este hurto. Por ende llamamos a Litoral Gas. Nos atendieron y nos dijeron que iban a venir al domicilio, pero lo que yo denuncié era el hurto y vinieron a las tres horas, se llevaron los medidores y nos pusieron un cepo, nos dejaron un papel que dice que el corte de suministro era por pérdida en el accesorio de gabinete y el flexible estaba roto", detalló.
"Acá no había ninguna pérdida de ningún accesorio, acá me hurtaron el accesorio", explicó Cecilia y agregó: "Ahora tenemos que llamar a un gasista matriculado por la inspección dentro de mi casa, cuando lo que yo quería hacer era denunciar que alguien vino y nos sustrajo todos los caños a todos los vecinos".
Contó que la habilitación la hicieron hace 10 años. "Hoy vino el gasista matriculado, tenemos que cambiar accesorios, y calculamos entre 15 y 30 mil pesos. Depende las cosas que tengamos que cambiar", indicó.
Por su parte, José señaló que hay alrededor de siete vecinos en la misma situación y denunció que "los ciudadanos estamos totalmente abandonados".
"La Defensoría del Pueblo, Atención Ciudadana del Municipio nos tendrían que escuchar. Nos roban las cosas, tenés que hacer todo el trámite y te cobran; no lo rompimos nosotros, sino que el estado no nos da seguridad", advirtió el vecino al móvil de Aire de Santa Fe.
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