Viajaron de Santo Tomé a Córdoba para descansar y les destruyeron las motos: "Volvimos con un dolor terrible"
Cuatro amigos planearon un viaje a Córdoba, pero todo terminó en angustia. Les incendiaron una moto y las otras dos aparecieron destrozadas en un descampado.
Viajaron de Santo Tomé a Córdoba para descansar y les destruyeron las motos
Lo que debía ser un descanso entre amigos terminó convertido en una pesadilla. Cuatro jóvenes que viajaron desde la vecina ciudad de Santo Tomé para disfrutar unos días en Córdoba sufrieron un violento hecho de inseguridad durante su primera noche en la localidad: les robaron tres motos, una fue incendiada y las otras dos aparecieron completamente destruidas en un descampado.
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Miguel, uno de los damnificados, contó en AIRE cómo se desarrollaron los hechos que les arruinaron el viaje a la localidad de San Antonio de Arredondo, ubicada ocho kilómetros al sur de Villa Carlos Paz. “Llegamos el jueves al alojamiento que ya teníamos reservado. Le preguntamos al dueño si la zona era segura y nos dijo que sí”, relató.
La tranquilidad del entorno —una zona de casas de fin de semana— les dio confianza para dejar las motos estacionadas bajo una galería techada de la casa.
Esa noche, tras cenar y planificar la ruta para el día siguiente, se fueron a dormir sin imaginar lo que les esperaba. “A las 9 de la mañana, uno de mis amigos me despierta desesperado: no estaban tres de las cuatro motos”, contó Miguel.
La reacción fue inmediata: llamaron a la policía y al dueño del inmueble. Pero la ayuda oficial fue escasa. “Nos miraron con resignación, sin darnos respuestas. Nosotros mismos salimos a buscar”, dijo.
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El hallazgo de las motos
A 100 metros del alojamiento hallaron una de las motos incendiada. Las otras dos estaban unos 400 metros más abajo, cerca del río, escondidas bajo ramas y con signos evidentes de vandalismo.
Una de las motos dañadas era una Kawasaki Z400 2025 recién comprada. Otra, del mismo modelo pero versión 2024, también sufrió graves daños. La más afectada fue una Suzuki DR650 modelo 2024, completamente quemada. “No sabemos si fue maldad o si intentaron prenderlas fuego para venderlas por partes”, lamentó Miguel.
Para los amigos, el viaje terminó en angustia, frustración e impotencia. “Fuimos a pasar un fin de semana de descanso, entre amigos, y nos volvimos con un dolor terrible; con angustia por el daño que nos hicieron. No encontramos justificación para lo que se hizo. Sinceramente, no se puede creer”, cerró Miguel.
