Tentativa de femicidio: quiso apuñalar a su pareja en el cuello y la atacó a golpes durante toda la noche
El juez Octavio Silva dictó la prisión preventiva para un hombre imputado por tentativa de femicidio que investiga la fiscal Escobar Cello.
El juez Octavio Silva dictó la prisión preventiva para un hombre imputado por tentativa de femicidio que investiga la fiscal Escobar Cello.
La medida fue dictada por el juez Octavio Silva en el marco de una audiencia realizada en la sala 2 de los tribunales santafesinos. La fiscal de la Unidad de Violencia de Género, Familiar y Sexual, Luciana Escobar Cello, solicitó que el sospechoso transite el proceso privado de su libertad.
El imputado, identificado como Cristian Gabriel Lemaire, fue asistido por el defensor público Sebastián Amadeo, quien cuestionó la calificación legal de tentativa de femicidio y reclamó medidas alternativas a la prisión preventiva.
La fiscal repasó el violento episodio atribuido a Lemarie, que sucedió durante la noche del 25 y la mañana del 26 de agosto, en una precaria vivienda ubicada en inmediaciones de Padre Genesio y Menchaca.
Cerca de las 9 de la mañana, personal policial de la agrupación CUERPOS llegó hasta el lugar cuando un vecino de la zona llamó al Servicio de Emergencias 911 y dijo que una mujer corría por la calle semidesnuda, perseguida por un hombre con un cuchillo en la cintura, y que la había estado golpeando durante la noche.
Los mujer le dijo a los policías que había discutido con su pareja, que éste la había golpeado con los puños en la cabeza y en el rostro, y con un palo de escoba. Agregó que intentó cortarle el cuello con un cuchillo y que ella logró evitarlo.
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La policía detuvo al imputado en el lugar, que tenía sangre en sus manos, secuestró un cuchillo, prendas de vestir de mujer con aparentes manchas de sangre, y la víctima fue trasladada para que el médico policial constate la gravedad de las lesiones.
En tanto, fueron entrevistados los vecinos de la zona, que refirieron haber escuchados gritos y golpes durante la noche, y que la mujer en dos oportunidades había salido corriendo a la calle, pero el hombre había logrado interceptarla y hacerla ingresar a la vivienda. Una de las vecinas agregó que escuchó gritar a la mujer: “Mirá lo que hiciste, me apuñalaste en la garganta”.
Por su parte, la víctima amplió su declaración ante el personal de la Brigada de Femicidios: explicó que comenzó a convivir con el imputado tres semanas atrás, y que la relación había comenzado en diciembre de 2023. Hasta entonces, vivía con su madre y sus hijos, en casa de su madre.
La mujer agregó que Lemaire es un hombre muy celoso, que no la dejaba salir y que esa noche habían discutido porque ella quería ir a casa de su madre, a ver a sus hijos, cansada de los golpes. La fiscal precisó que actualmente la víctima se encuentra a cuidado de su madre, ya que quedó muy dolorida por los golpes, y que eso también la imposibilitó a presentarse a declarar en la audiencia.
A su turno, el abogado defensor cuestionó la calificación legal de tentativa de femicidio. Amadeo sostuvo que se trata de un hecho de lesiones leves, ya que se constataron heridas en la víctima y en el imputado, y el tiempo estimado de curación es de ocho días.
El defensor agregó que no se puede considerar acreditado una intención femicida en Lemaire, ya que, con su contextura física, de haber querido terminar con la vida de la víctima hubiera podido hacerlo.
Amadeo remarcó que el imputado no cuenta con antecedentes condenatorios, que tiene cuatro hijos, dos de ellos menores de edad, que tiene arraigo familiar y que sustenta a su familia realizando changas.
Al momento de resolver, el juez Silva avaló la hipótesis fiscal de intento de femicidio. El juez destacó las declaraciones que acreditaron el ataque con un arma blanca al cuello de la mujer: una vecina la escuchó gritar, un vecino vio al hombre correr con un cuchillo en la cintura, y luego la propia víctima se lo comentó a la policía.
La intención femicida está clara: fue un ataque con un arma blanca a una zona vital del cuerpo. El magistrado valoró también la “persistencia en el ataque” protagonizado por el agresor, que además corrió dos veces a la mujer por la calle cuando ella intentó escapar.
El juez evaluó que el imputado conoce a los vecinos que declararon como testigos, y que se deben garantizar esas declaraciones, así como la de la propia víctima.
Finalmente, Silva repasó toda la normativa internacional que brinda protección especial a las mujeres en causas de violencia de género: en este caso la víctima quedó con secuelas no sólo físicas sino también psicológicas.
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