Un enfrentamiento insólito terminó con dos hombres aprehendidos este jueves al mediodía en la intersección de Castelli y la vía, en jurisdicción de la Comisaría 8° de Santa Fe. Todo se desencadenó por la mordedura de un perro y derivó en una pelea a golpes que obligó a la intervención policial. Es la segunda pelea por el mismo motivo en dos días.
Pelea entre dos vecinos en Santa Fe
El insólito y violento hecho se produjo el mediodía del jueves en Castelli y la vía. Los agentes del Comando Radioeléctrico llegaron al lugar alrededor de las 12:50 tras recibir un aviso por una fuerte gresca entre dos vecinos, dos días después de un problema similar en Santo Tomé.
Al arribar, se encontraron con un hombre de 54 años que aseguró haber sido mordido por un can y relató que, tras el incidente, el dueño del animal —un hombre de 36 años— salió furioso y lo atacó con golpes de puño, provocándole lesiones en el rostro.
El hombre mayor explicó que se defendió ante la agresión y que ambos terminaron enfrentados en plena calle. Cuando intervino la policía, los dos manifestaron su intención de radicar una denuncia por lesiones leves dolosas mutuas.
Los agentes solicitaron una unidad de apoyo para trasladar al hombre de 36 años, quien fue revisado previamente por Medicina Legal como parte del procedimiento correspondiente.
La pelea quedó registrada como un caso de violencia vecinal desencadenado por un conflicto menor que escaló rápidamente. La investigación continúa bajo la órbita de la jurisdicción.
Santo Tomé: denuncian que un joven fue golpeado con una pala durante una pelea entre vecinos
Según el relato del padre del adolescente, todo comenzó cuando su perro se escapó y fue atacado por el animal de un vecino. “Mi perro se escapa, el perro del vecino lo agarra y lo arrastra. Cuando mi hijo intenta sacarlo, este tipo saca una pala y le pega tres golpes en la espalda, el cuello y los brazos”, contó en diálogo con AIRE.
El hombre agregó que, mientras el joven intentaba levantarse, el agresor “le dio una piña en la frente”. “Luego mi hijo más grande alcanzó a sacar al perro y al hermano. Llamamos al 911, esta persona ya no estaba más afuera, cuándo yo llegué. Golpeamos la puerta y salió muy agresivo, diciendo que agradezca que mi hijo no estaba muerto”, relató.