“Cuando volví, encontré todo dado vuelta”: el testimonio de la víctima
“Me fui a kinesiología a las 11:15 y cuando regresé vi la puerta del dormitorio de mi nena abierta. Entré y estaba todo dado vuelta, todo tirado”, relató en diálogo con AIRE, aún conmocionada.
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La mujer explicó que al revisar el asador notó detalles que confirmaban el ingreso forzado: “En el asador, donde hay vidrio repartido, vi la puerta ventana abierta. Un limonero cortado. No sé cómo se metió el tipo, se habrá trepado. Los palos de la pala y la escoba estaban tirados”.
El impacto emocional fue inmediato. “Empecé a llorar y llamé a la policía”, expresó con la voz quebrada. Minutos después, los efectivos llegaron al lugar y tomaron los datos para iniciar la investigación.
Se llevaron computadoras, dinero y objetos de valor: “Ya no se puede ni ir a trabajar”
Olga detalló que el ladrón escapó con pertenencias de enorme valor para su familia: “Robaron la computadora de mi nena que estudia Medicina, justo ayer ella rendía. También plata, anillos”.
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El golpe psicológico fue tan fuerte que la mujer —actualmente con licencia médica— aseguró que quedó sin fuerzas: “Quedé muy mal, sin ánimo de nada. Gracias que mis hijos no estaban. Cuando regresé a mi casa, se habían llevado todo”.
La vecina advirtió que los ataques se repiten en la zona sin freno: “Nuestro barrio Sargento Cabral es tierra de nadie. Hay gente que vigila y después roba cuando uno sale a trabajar. Así como me entraron a mí, le están entrando a todas las casas del barrio”.
Olga pidió mayor presencia policial y expresó su agotamiento: “Esto no da para más. Ya no se puede ni ir a trabajar”.