En una nueva entrega de Emprendedores santafesinos, te contamos la historia de Natalia Tablada, quien está a cargo de MP pastelería, una marca que fabrica tortas personalizadas y alfajores únicos, que saca a la venta semanalmente y se agotan en media hora.
Aire Digital habló con la joven de Santo Tomé, quien relató que antes del emprendimiento, trabajaba en la administración pública y tuvo otros trabajos. Siempre le gustó la cocina pero lo hacía como hobbie, "era la que llevaba las tortas a las peñas, a las juntadas familiares, disfrutaba mucho hacerlo. Siempre me quedaba mirando videos en YouTube de recetas y decoración de tortas", aseguró Tablada.
Como le "sobraba tiempo" y se considera muy hiperactiva, empezó a hacer alfajores y budines para vender los fines de semana y la marca empezó a expandirse cada vez más. En ese momento, estaba disconforme con su trabajo: "trabajaba 12 horas y salía llorando, muy estresada, mis vínculos afectivos estaban mal", explicó.
Entonces decidió dedicarse de lleno a la pastelería, con todo lo que eso significaba: romper con todo lo establecido en su vida, abandonar su sueño de un contrato fijo en el trabajo, la seguridad económica, para dedicarse a otro sueño completamente distinto. "La vida me puso en este lugar porque quiso, no fue planeado", manifestó.
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Tenía unos ahorros que los invirtió en comprarse un horno, una heladera, una batidora, y aunque ya vendía a varios clientes antes, a partir de ahí dio un giro completo. "Empecé a vender el triple. Recuerdo que el 11 de septiembre de 2019 volví de Rosario emocionada con mi horno nuevo. Todavía no hace ni un año y MP creció muchísimo", relató.
Para la joven ese crecimiento "fue inesperado, no lo planeé, pero las cosas pasan por algo". "En el trabajo me dijeron que no me iban a renovar el contrato y fue lo mejor que me podía pasar para que todo se de de esta manera, así tenía que ser", expresó.
Aseguró que emprender no es solo producir: tuvo que hacer cursos de marketing y contenido digital, que nunca antes imaginó aprender. Hoy en día, trabajando en el emprendimiento junto a ella está "Fede", su novio, quien vio afectado su anterior trabajo por la pandemia, así que viven los dos de MP.
"Nos dimos cuenta que trabajando los dos podíamos producir el doble, así que le enseñé a usar la manga, a cortar tapitas para los alfajores y bañarlos en chocolate", explicó.
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El fin de semana pasado trabajaron 11 horas y media, parados frente a la cocina, pero asegura que "terminó el día y dije 'wow', no me siento mal por haber trabajado tanto, por el contrario, estoy feliz y agradecida, ahora encaro la vida de otra forma".
Decorar las tortas es lo que más ama. Le encanta cuando las clientas lo dejan a su criterio, y puede crear sin limitaciones. Nunca planea cómo la va a decorar, lo deja fluir en el momento. Empezó vendiendo una torta por mes, hoy en día vende tres o cuatro por semana.
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Sus productos estrella: alfajores y huevos de pascua
En cuarentena no estaban trabajando, y para pascuas decidió lanzar un huevo de chocolate relleno con distintos ingredientes como dulce de leche o mantequilla de maní. Su límite era vender 50, pero se llevó una grata sorpresa ya que el stock se agotó en unas horas. Extendió a 70 y le siguieron comprando.
"No podía dejar pasar la oportunidad y llegamos a vender 150 en una semana", contó y agregó que "la repercusión fue tremenda, y fue cuando descubrí lo que es producir en cantidad, el tiempo de organización y demás. Era toda la casa llena de huevos y cajas donde iban guardados, que las armábamos una por una".
Una situación similar sucedió con su otro producto estrella: las cajas de alfajores surtidos. Subió la propuesta a las redes con un límite de 20 y la gente le seguía preguntando. Al próximo fin de semana se vendieron 50, y luego 70. Ese es su máximo, pero deja gente en lista de espera para la próxima semana. "No lo esperábamos, fue increíble, los hice para probar y ahora son un récord porque se agotan en media hora", expresó.
Ser emprendedor "te hace pensar todo el tiempo en un montón de cosas para el futuro", pero su mayor meta hoy en día es poder tener un taller, y separar el trabajo de su casa. Tablada aseguró que "si tenes un sueño anda por el sin dudarlo, si vos le pones lo mejor de vos, te aseguro que vas a tener éxito".
Además indicó que el crecimiento tiene un proceso, que al principio nada es como uno lo espera, "me pasó de empezar haciendo porciones de torta y no vender ninguna, que se las termine comiendo mi familia". Aunque considera que es una privilegiada, aconseja no desesperar, tener paciencia y dar todo de uno para lograr el objetivo.
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"No estoy ningún momento de mi vida sin pensar en el emprendimiento, busco todo el tiempo recetas nuevas, es toda mi vida. Además recibo muchos mensajes lindos, hay clientes que compran regularmente y me dicen que es lo mejor que les pasó el fin de semana", concluyó.