También soñó, alguna vez con ser millonario, viajar en primera, vestirse bien y darse esos lujos que se ven en las series y películas sobre la alta sociedad.
Lo cierto es que el camino propio comenzó apenas ingresado a la secundaria: al ver que el buffet del colegio estaba cerrado, decidió comenzar a hacer él mismo sándwiches de jamón y queso para venderles a los otros chicos. Tiempo después, con solo 16 años y siendo amante de la actividad física, fue por más.
Hizo un curso de personal trainer y musculación con el certificado correspondiente para ser profe. Eso le sirvió, un año después, para poder trabajar, manejando sus horarios mientras cursaba los primeros años de la carrera de ingeniería.
El crecimiento de lo que terminó llamándose “Gualda Training” fue exponencial.
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Emprender desde la universidad: Axel Gualda y su visión sobre innovación, capacitación y el futuro de los negocios.
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Primero arrancó con clases individuales, luego incorporó a otros profesores, organizó grupos de entrenamiento en parques y finalmente terminó dedicándose a la administración del negocio.
En el camino, fiel a su espíritu emprendedor, ideó una marca de ropa deportiva, planes de alimentación a distancia y otros productos asociados a la actividad deportiva. Y hubo, además, múltiples otros proyectos: aplicaciones, gimnasios, intento de un local de sushi, una fábrica de pastas, compra y venta de celulares y hasta el proyecto de una metodología propia de entrenamiento.
“Al emprender, lo único que importa, realmente, es si la gente quiere o no quiere el producto o servicio que uno ofrece. No tanto la plata en sí, sino lo que la plata representa. En ese sentido la valoración del intercambio, el tiempo, la energía. Si lo que uno cree que será mágico, nadie lo quiere comprar, ahí tenés una lección para aprender. Posiblemente, el problema que creías resolver no era tan importante o tus usuarios target tienen otras prioridades. Por lo tanto, lo importante hoy es hacer, ejecutar. Hoy cuando vas a ver un fondo de inversión, lo primero que te preguntan es cuántos clientes tienes, hace cuánto, cuánto te pagan y por qué. O sea, la idea hay que validarla y ejecutarla. Lo cierto es que no hay fórmulas, lo que prima son las ganas y la chispa”, detalla el emprendedor a Aire Digital.
¿Alguien conoce al cliente? Así llegó Chatty
A pesar del crecimiento sostenido que venía teniendo Gualda Training, había algo que a Axel lo desvelaba. Las ventas las hacía a través del marketing digital, en general publicidad, y las terminaba de concretar por Whatsapp. Pero le costaba saber, a la hora de recibir nuevos contactos, de dónde venían los leads. O sea, no sabía cuál de los anuncios era el que funcionaba y el que no (o el que menos). Como buen ingeniero, quiso entender y sistematizar un proceso para poder conocer el origen de sus clientes: tener la trazabilidad.
Así fue que creó un sistema para eso, que luego se convirtió en Chatty Analytics: una herramienta de whatsapp business con superpoderes para empresas, especializada en analytics y marketing performance, que les permite a las compañías incorporar IA con un enfoque híbrido, bajo la premisa de que, más allá de la automatización, a la gente todavía le gusta interactuar con personas.
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Emprender, sí; estudiar, también
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Axel Gualda y su visión sobre innovación, capacitación y el futuro de los negocios.
A diferencia de otros emprendedores, que dejan todo cuando alguno de los proyectos comienza a tener buenos resultados, Axel confió en su capacidad y los manuales correspondientes para poder ingresar a la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), donde estudió ingeniería industrial.
Al recibirse, comenzó a dar clases en la materia de Economía, donde permaneció durante varios años.
Fue ahí, justamente, que vio la oportunidad de hacer algo más vinculado a su expertise en la facultad y con apoyo de los directivos, fundó UTN Labs, la primera aceleradora de startups perteneciente a la universidad pública.
Inquieto y con las ganas de los jóvenes estudiantes como aliada, fue que los ayudó a crear y lanzar, recientemente, Transferime, una plataforma para automatizar y facilitar el cobro de honorarios por parte de psicólogos, algo que luego se ampliará a otras profesiones y oficios.
Con sus tres “hijos” andando -Chatty, Gualda Training y UTN Labs- Gualda pasa la mitad del tiempo en Brasil, donde con fondos de palmeras y el sonido del mar, sigue paso a paso las posibilidades de mejorar la captación de clientes y la trazabilidad a través de Whatsapp, mientras monitorea el crecimiento de sus emprendimientos y va pergeñando lo que vendrá.
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"Mi “nuevo” emprendimiento es Chatty, el sistema de trazabilidad y automatización de ventas por Whatsapp". Empezó hace dos años y medio y ya estamos en veintiséis clientes, con marcas muy grandes como Tupperware, la Universidad Católica de Córdoba, diferentes inmobiliarias, centros de odontólogos, estética, etc. "Tenemos un objetivo muy fuerte de crecimiento, apostando a llegar a 300 clientes en un año”, cuenta Gualda.
Sobre su rol de mentor destaca que es muy consciente de lo difícil que es emprender y querer crear algo de verdad y llevarlo a la realidad. “En ese sentido, no puedo evitar sentir admiración cuando encuentro a alguien que realmente está emprendiendo y cuando digo realmente es que se está rompiendo el lomo para sacar adelante un proyecto. Y ahí, en todo lugar donde pueda dar una mano a alguien que está haciendo eso, lo voy a hacer. Es un punto clave la colaboración entre emprendedores”, finaliza.