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La conmovedora historia que arrasa en TikTok: el gatito melómano que se curó con la música

Azim, un adorable gato blanco con manchas negras, se convirtió en un fenómeno viral en TikTok al demostrar cómo la música lo ayudó a superar problemas de salud y a sanar emocionalmente.

Azim, un gatito de apariencia tierna y con una historia conmovedora, se ganó los corazones de miles de personas en TikTok gracias a su especial conexión con la música.

Este pequeño felino, conocido por su fascinación por las melodías, no solo se convirtió en una sensación viral, sino que además, la música jugó un papel fundamental en su recuperación tras enfrentar graves problemas de salud.

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La historia de Azim comenzó en circunstancias trágicas. Cuando era apenas un bebé, sufrió un accidente durante una fiesta en el que fue pisado accidentalmente, lo que le causó un traumatismo cerebral severo.

Su situación era crítica y, durante su estancia en la unidad de cuidados intensivos, los médicos temían por su vida, además de ser pesimistas respecto a su recuperación sin discapacidades. En este escenario tan difícil, una mujer decidió intervenir y llevarse al gatito a su hogar, ofreciéndole un lugar seguro y lleno de amor.

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El vínculo entre Azim y su nueva dueña fue instantáneo, y pronto descubrió que el canto y la música eran lo único que lograban calmarlo en los momentos más difíciles.

Según relata su dueña, "Mi pequeña 'cabra' estaba muy enfermo, pero la única cosa que lo consolaba era una canción que le cantaba". Con el paso del tiempo, este momento de serenidad se convirtió en un ritual que ayudaba al gato a sobrellevar los ataques constantes que sufría a causa de su lesión cerebral.

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La conexión entre Azim y la música se hizo aún más profunda cuando su dueña, Pnar Gökta, comenzó a compartir videos de su gato disfrutando de sus canciones acompañadas por un saz, un instrumento tradicional turco de cuerdas. En esos videos, Azim parece entrar en un trance, cerrando los ojos y disfrutando de las melodías.

Sin embargo, su reacción también muestra su personalidad: si la canción no le gusta, el felino rápidamente muestra su descontento, maullando y arañando en señal de protesta. "Un día supongo que canté la canción equivocada y se enojó mucho", comenta Gökta con humor.

A medida que los videos de Azim se compartían en redes sociales, su historia de superación tocó las fibras de miles de personas, convirtiéndolo en un verdadero fenómeno viral en TikTok. Los seguidores quedaron cautivados por su ternura y, sobre todo, por la forma en que la música se convirtió en un bálsamo para su salud emocional y física.

A lo largo de los meses, la dueña de Azim continuó dedicando su vida a cuidar al gatito y a otros animales con discapacidades, ofreciéndoles un entorno lleno de amor y serenidad.

La música, que comenzó como una forma de aliviar el dolor de Azim, se ha transformado en un elemento fundamental de su recuperación, demostrando cómo el poder de la melodía puede ser una herramienta terapéutica inesperada.