Las sierras de Córdoba esconden rincones ideales para disfrutar del aire libre con chicos. Estos senderos combinan naturaleza, aventura y paisajes únicos para compartir en familia.
Las sierras de Córdoba invitan a descubrir senderos perfectos para familias que buscan aventura, naturaleza y momentos compartidos. En el Valle de Punilla y las Sierras Chicas se concentran algunos de los recorridos más elegidos, con caminos accesibles que conducen a cascadas escondidas y paisajes que sorprenden a cada paso.
En el corazón de Flor Serrana, Tanti, se encuentra la Reserva Natural Privada Los Chorrillos, hogar de una de las cascadas más impactantes de la región. El sendero se extiende unos 7 km por tramo y atraviesa bosques, arroyos y miradores naturales. Aunque la caminata de ida puede llevar unas dos horas y media, la vuelta se completa en menos tiempo y sin mayores exigencias.
Este circuito regala postales inolvidables y culmina con la vista de la cascada de 115 metros, que cae con fuerza entre la vegetación serrana. El recorrido se puede hacer con niños, siempre que estén acostumbrados a caminar distancias largas.
Ubicada en la localidad de Unquillo, esta reserva hídrica y recreativa de 5.000 hectáreas ofrece distintos senderos dentro de un ecosistema serrano repleto de aves y vegetación nativa. El arroyo Cabana y el arroyo Las Ensenadas acompañan buena parte del camino.
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La opción más elegida por familias es el sendero corto, de 2 km, ideal para quienes van con niños pequeños. También hay otro trayecto de dificultad media que implica trepar algunas piedras y avanzar por sectores más empinados, perfecto para quienes buscan un poco más de desafío sin alejarse de la tranquilidad del lugar.
El Parque La Quebrada, en Río Ceballos, es otro de los escenarios ideales para una salida en familia. Desde la avenida San Martín se accede fácilmente hasta el Dique La Quebrada, punto de partida hacia dos accesos: Pozos Verdes o Colanchanga, donde se puede dejar el vehículo.
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Desde allí, los carteles indican el camino hacia la Cascada Los Hornillos, una caída de agua de 10 metros rodeada de verde y tranquilidad. El sendero de 2 km de baja dificultad permite que grandes y chicos lo recorran con facilidad y disfruten de una experiencia inmersiva en plena naturaleza.
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