Rubén Aguilera vuelve a enfrentar el dolor. Esta vez, su hija de 30 años y su nieto de 10 resultaron heridos tras una balacera durante la madrugada del sábado en la manzana 3 de Alto Verde. Ambos continúan internados, y mientras la situación médica se define hora a hora, él relata entre angustia y cansancio una historia familiar marcada por la tragedia.
Alto Verde: el testimonio de Rubén
“Le pegaron a mi hija y a mi nieto. Estaban en la habitación”, contó. Según su testimonio, los atacantes llegaron en plena madrugada, se subieron al tapial de dos metros que rodea la vivienda y dispararon directamente hacia la ventana. “Fueron siete tiros. Nosotros ya sabemos quién fue el que tiró”, afirmó, aunque hasta el momento no hay detenidos.
Hospital José María Cullen
La hija de Rubén está internada en el hospital José María Cullen de la ciudad de Santa Fe.
La mujer se encuentra internada en terapia intensiva en el Hospital Cullen. Ingresó con una herida de arma de fuego en la zona del homóplato y permanece bajo monitoreo. Los médicos evalúan una posible intervención para extraer el proyectil alojado. Su estado es delicado.
El niño, en tanto, permanece en el hospital Alassia con una herida en la rodilla. “Gracias a Dios, según los médicos, no tiene ninguna lesión de gravedad”, expresó Aguilera. El menor se encuentra fuera de peligro, aunque continúa bajo control médico.
Rubén asegura que la familia no tiene conflictos barriales. “Nosotros no tenemos problemas con nadie. Ni yo ni mi exmujer”, insistió. Luego, su relato se quebró al repasar los últimos años: “En el 2022 me mataron a mi hijo. Salió de trabajar de la panchería y no volvió. A los seis meses murió mi hija de un paro cardíaco, de tristeza”.
Reconoce que su salud emocional aún está en recuperación: “Yo tuve problemas psicológicos, estaba saliendo. Vivo tomando pastillas. Tengo miedo de que me vuelva a pasar otra desgracia”.
Mientras aguarda el parte médico, se prepara para hacer la denuncia formal. El niño, contó, no deja de preguntar por su mamá: “Es muy pegado a ella”.
La investigación por la balacera quedó en manos de la Fiscalía de Homicidios, a cargo de la Dra. Laura Urquiza. No hay detenidos ni armas secuestradas, pero se analizan cámaras de seguridad y testimonios para avanzar en la identificación de los autores. La familia, una vez más, espera justicia.
Alto Verde: cómo se produjo el ataque a la vivienda
Según el relato de los familiares, la balacera se originó fuera de la vivienda cuando se escucharon varias detonaciones. Los disparos atravesaron el frente del domicilio e impactaron en la joven y a su pequeño hijo. Hasta el momento, los autores no han sido identificados.
En la escena trabajó personal de la Policía de Investigaciones, con la intervención de los equipos de Balística, Fotografía y Planimetría. Además, se dispuso el relevamiento de cámaras de seguridad en la zona para intentar dar con los responsables.
La causa permanece bajo la órbita de la Fiscalía de Homicidios, a cargo de la Dra. Laura Urquiza. No hay detenidos ni armas secuestradas hasta el momento.