Según indicaron familiares de la víctima, algunos de los abusos ocurrieron cuando la chica visitaba a su pareja en prisión.
¿Dónde está Mónica Aquino?, la pregunta que se hacen todos y nadie encuentra respuesta desde el 5 de Mayo del 2023, cuando fue vista por última vez.
El juicio por la explotación sexual a la que fue sometida Mónica Aquino, la mujer desaparecida en 2023 en zona sur de Santa Fe, reveló este lunes nuevos datos sobre el contexto de violencia y prostitución en el que se encontraba inmersa la mujer que residía en barrio Varadero Sarsotti.
El debate arrancó el pasado viernes ante un tribunal conformado por los jueces Rosana Carrara, Susana Luna y Leandro Lazzarini quienes evalúan las pruebas que pesan sobre los tres acusados: Hugo Pérez, la pareja de Mónica; su hermano Mario Daniel; y María Rosa Aguirre, la madre de ambos hermanos.
Los tres llegaron al juicio detenidos, con prisión preventiva, e imputados por los delitos de explotación de la prostitución ajena agravada en concurso real con promoción de la prostitución ajena y lesiones leves dolosas calificadas por el vínculo y el contexto de violencia de género.
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Por el caso, los fiscales Jorgelina Mosser Ferro y Matías Broggi, anticiparon que pedirán en los próximos alegatos de clausura una pena de 20 años de prisión para Hugo Pérez y 10 para su hermano y madre.
En la jornada de este lunes declararon ante el tribunal una serie de familiares de Mónica que explicaron cómo era la mujer antes y después de haber conocido a Hugo Pérez y el contexto de prostitución y violencia al que fue sometida.
Una de las familiares que declaró dijo que Mónica le contó que había sido abusada por al menos siete presos durante una visita a Hugo Pérez, cuando este aún purgaba una pena por intento de homicidio en prisión. “Me contó que la abusaban y él no hacía nada”, recordó la testigo.
Si bien no dio mayores detalles sobre aquel estremecedor recuerdo, la testigo agregó que tras salir Pérez de prisión, Mónica le contó que se sentía cansada de vivir junto a él y su entorno familiar, ya que “Hugo se emborrachaba y la violaban entre todos” en el interior de la casa de Varadero Sarsotti en donde residían.
Otra familiar también declaró sobre el deterioro en la salud de Mónica porque un tiempo antes de desaparecer estaba muy flaca y siempre tenía un golpe en alguna parte de su cuerpo. “La golpeaban por todo”, aseguró y aclaró que era una chica siempre alegre, pese a los tormentos que vivía.
El juicio por la explotación sexual a la que fue sometida la mujer de 29 años continuará este próximo martes con más testigos citados por la Fiscalía del caso.
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Según fuentes judiciales, está previsto que declaren vecinos del barrio Varadero Sarsotti, en donde residía la víctima junto con Pérez, su hermano Mario y la madre, ambos sindicados proxenetas.
Los alegatos de cierre, por su parte, está previsto que se desarrollen el 28 de noviembre, mientras que la sentencia del juicio se dará a conocer, en principio el 2 de diciembre próximo.
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