El primer episodio tuvo lugar en la madrugada del sábado en una vivienda ubicada en Talcahuano al 7700, en barrio Guadalupe Noreste.
El dueño de la casa, un hombre de 44 años, relató a la policía, salió de su hogar para asistir al cumpleaños de su tío y cuando regresó, cerca de las 3 de la mañana, notó algo que le llamó la atención: las luces del interior estaban encendidas.
Al intentar ingresar con su camioneta, descubrió que faltaban varios objetos clave. Entre ellos, el control remoto de la alarma, su billetera y las llaves de la casa. Sorprendido, decidió utilizar un juego de llaves que tenía escondido en el patio para entrar al domicilio.
Una vez dentro, el escenario que encontró fue impactante. Los placares del living estaban abiertos, y al llegar a su habitación, halló la caja fuerte tirada en el suelo, abierta y vacía. Según explicó, en esa caja guardaba una importante suma de dinero en dólares.
Además, los delincuentes vandalizaron el sistema de videovigilancia, lo que afectó gravemente las posibilidades de obtener imágenes que pudieran contribuir a la identificación de los responsables.
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Salieron a cenar y fueron víctimas de un robo millonario en su casa
Menos de 24 horas después, ocurrió otro robo de similares características en barrio Ciudadela. En este caso, los hechos se desarrollaron en una vivienda ubicada en Doctor Zavalla al 5400, en el norte de la ciudad de Santa Fe.
Según fuentes policiales, los propietarios salieron a cenar durante la noche del sábado y, al regresar cerca de la medianoche, se encontraron con su hogar completamente desvalijado.
El primero en llegar fue uno de los hijos del matrimonio, un hombre de 40 años, quien se encontró con el portón del garage abierto y la puerta que conectaba con la cocina también forzada. Las luces del interior estaban encendidas, y toda la casa había sido revuelta.
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Tras revisar las habitaciones, el hombre descubrió que los ladrones se habían llevado una suma millonaria de dinero que estaba guardada en un mueble, proveniente de la reciente venta de una embarcación.
Además del dinero en dólares y pesos, los delincuentes robaron relojes y otras joyas de valor. También se apropiaron de la llave de la vivienda, que se encontraba dentro de un vehículo estacionado en el garage.
Al darse cuenta de la magnitud del robo, la familia llamó de inmediato a la Central de Emergencias 911. El personal policial llegó rápidamente al lugar, acompañado de los peritos de la PDI, quienes se encargaron de realizar las pericias.
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Durante la inspección, encontraron huellas dactilares que podrían ser clave para identificar a los responsables del robo. Sin embargo, los delincuentes también se llevaron el disco rígido que almacenaba las grabaciones de las cámaras de seguridad de la casa, lo que complica aún más las investigaciones.
A pesar de que los dos robos se dieron en barrios diferentes, existen varias similitudes entre ambos hechos. En los dos casos, los ladrones actuaron cuando los propietarios no estaban en sus hogares, y en ambos robaron importantes sumas de dinero en dólares.
Además, los sistemas de seguridad de ambas viviendas fueron vulnerados, ya sea por el robo del control de la alarma en Guadalupe Noroeste o la sustracción del disco rígido de las cámaras de seguridad en Ciudadela.
Ambos casos fueron derivados a la Policía de Investigaciones (PDI), que se hizo presente en ambos sitios para llevar adelante las pericias correspondientes.
