Como resultado de las medidas ordenadas por la Justicia, los efectivos secuestraron un revólver, que quedó a disposición de los investigadores y será sometido a peritajes para determinar si se trata del arma utilizada en el homicidio.
El crimen ocurrió en julio en barrio San Pantaleón
El hecho ocurrió el 25 de julio de este año alrededor de las 19.30, cuando vecinos de la zona de Martín Zapata y Estrada, alertaron a la central de emergencias 911 sobre un joven que había recibido disparos de arma de fuego.
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Según relataron testigos, Ojeda se encontraba parado en la esquina cuando se acercó un motociclista con quien mantuvo un breve intercambio. Minutos después, la situación escaló en gritos y el agresor, aún arriba del rodado, extrajo un arma y disparó a quemarropa, para luego darse a la fuga.
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Tras el ataque, la víctima cayó herida en la calle. Vecinos y familiares lo asistieron de inmediato y uno de ellos lo trasladó en un auto particular hasta el hospital Iturraspe. En paralelo, personal del Cuerpo Guardia de Infantería llegó al lugar, preservó la escena, entrevistó testigos y relevó la presencia de cámaras de videovigilancia.
A las 20.30, los médicos del hospital confirmaron el fallecimiento del joven. Desde ese momento, la causa quedó caratulada como homicidio, y la investigación continúa con el análisis de pruebas y los elementos secuestrados en los allanamientos.
