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Policiales Ciudad de Santa Fe | autos | Incendios

En la saga de autos incendiados, todos los caminos conducen a una banda de quemacoches

La principal hipótesis que barajan los investigadores de la División Informaciones de la URI es que una banda de quemacoches estaría detrás de los hechos registrados esta semana. El caso fue asignado a un fiscal de la Unidad de Flagrancia. El peritaje de las cámaras es una de las claves para esclarecer los atentados.

A 48 horas de que seis autos hayan sido incendiados en distintos sectores de la ciudad de Santa Fe, policías de la División Informaciones de la Unidad Regional I, junto con sus pares de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), buscan esclarecer cómo fue la saga registrada durante la madrugada en llamas que tuvo la capital provincial. Entre la tarde del miércoles y mañana del jueves, los investigadores del caso realizaron un intenso relevamiento de cámaras, privadas y públicas, por las zonas en donde ocurrieron los siniestros y además tomaron una serie de testimonios que fueron incorporados a la causa.

Los primeros autos incendiados, según los reportes oficiales, ardieron en llamas en Lisandro de la Torre al 3200, casi esquina Francia. Allí se prendieron fuego una camioneta Jeep blanca y un Volkswagen Pasatt. Mientras que los restantes tuvieron lugar en San Juan al 1800 (Volkswagen Polo); Gobernador Freyre al 1400 (una VW Surán que se encontraba en el interior de una cochera); Zavalla al 1900 (Ford Ka); y Amenabar al 3600 (un Peogeot 308). Tal secuencia se dio entre las 2.50 y pasadas las 4 de la madrugada del miércoles 17.

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Todos los autos se encontraban estacionados en zonas del macrocentro y los barrios Sur y Roma.

Todos los autos se encontraban estacionados en zonas del macrocentro y los barrios Sur y Roma.

Todos los vehículos quedaron prácticamente inutilizables y se incendiaron a partir de un ataque “violento, generalizado y acelerado”. Tal calificación, según indicaron allegados a la causa, se dio bajo el argumento de que en cada caso el atacante utilizó “un líquido acelerante” para generar la combustión, como, por ejemplo, nafta, alcohol o gasoil.

Si bien hasta el momento aún no hay personas identificadas, los detectives del caso confían en encontrar en los distintos registros fílmicos relevados en los dos días que lleva la investigación (de viviendas particulares, edificios públicos o privados, de la Municipalidad y 911) pistas que conduzcan a cómo fue el ataque de cada automóvil. Inclusive, trazar una línea de tiempo sobre cada uno de los incendios.

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En este sentido, la hipótesis que mayormente cobró fuerza durante las últimas horas es que los autos pudieron ser incendiados por parte de un grupo de jóvenes que motorizados salieron a la calle a realizar los hechos vandálicos. “Todo apuntaría a que sería una banda de pirómanos”, deslizó a AIRE una alta fuente del caso. De igual manera, los investigadores tampoco descartan que pudiera haber otro trasfondo.

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Si bien en el inicio de la investigación actuó por turno el fiscal Daniel Filippi, quien se desempeña en el área de Accidentes de Tránsito, el caso fue reasignado -por disposición del fiscal regional Carlos Arietti- al fiscal Ignacio Lascurain que oficia en la Unidad de Delitos en Flagrancia del Ministerio Público de la Acusación.

Dicho fiscal confirmó a la División Informaciones de la URI al frente de la pesquisa y además sumó aparte de investigadores de la AIC para que colaboren en el relevamiento y cotejo de cámaras de seguridad de la zona, la principal pista hacia donde apunta la causa por esas horas.