menu
search
Policiales

El ladrón de las tres identidades que pactó seis años de condena

Usurpó la identidad de un albañil y durante dos años intentó burlar a la Justicia. Un ADN lo delató y ahora deberá pasar seis años en prisión luego de quedar implicado en una causa que investigó múltiples escruches en un pueblo del interior de Santa Fe.

El misterioso y enigmático ladrón de las tres identidades, que intentó burlar a la Justicia provincial haciéndose pasar por otra persona, asumió esta semana hacerse cargo de una serie de robos, tipo escruches, que cometió en la ciudad de Gálvez, entre julio y diciembre de 2017. Se trata de Isaias López, un descarado galvense de 30 años que adoptó una falsa identidad durante todo el proceso judicial que lo tiene involucrado.

El mismo permanece detenido con prisión preventiva tras quedar implicado en una investigación que llevó adelante personal de la Unidad Regional XV y que encabezó el fiscal Marcelo Nessier, a cargo de la Fiscalía del departamento San Jerónimo. A dos años de aquella resolución que lo dejó preso, el muchacho acordó una pena de seis años de cárcel tras hacerse responsable de los cargos que le atribuyó la Fiscalía y que se unificaron a otra condena que se tramitó en la provincia de Buenos Aires.

Leer más ► Juego clandestino: cuando el dinero sucio termina en lavado, prestamistas, narcos y corrupción

El caso remonta al 2018, cuando luego de seis meses de investigación, los pesquisas detectaron que el responsable de varios ingresos a viviendas tenía nombre y apellido. Lo nunca imaginaron era que el mismo responsable iba a tratar de desafiar a la Justicia y a la propia policía con identidades falsas.

Un ticket, la pista principal

La historia de Isais López y su vínculo con el mundo penal comenzó entre julio y diciembre del 2017, cuando en Gálvez se registraron una serie de robos en al menos siete casas. La modalidad era siempre la misma: los dueños de la propiedad salían durante unas horas y al regresar encontraban el interior completamente revuelto y sin elementos de valor.

Ladrón de las tres identidades44.jpg
El caso fue investigado por agentes de la Unidad Regional XV y la Expolicía de Investigaciones del departamento San Jerónimo.

El caso fue investigado por agentes de la Unidad Regional XV y la Expolicía de Investigaciones del departamento San Jerónimo.

La saga criminal continuó durante meses hasta que en uno de los escruches, un policía que inspeccionó una vivienda detectó la presencia de una mochila que en su interior tenía un ticket de una recarga de teléfono celular. Tal hallazgo iba a ser la llave para desentrañar quién estaba detrás de los robos.

Tras una serie de trabajos de inteligencia, los investigadores consiguieron el teléfono que realizó la recarga y posteriormente lograron intervenirlo. Seguidamente, establecieron el domicilio de donde se encontraba el celular y así identificaron al titular de la línea. ¿Quién era?. Un tal “Isaias”.

Múltiples elementos

El 29 de mayo del 2018, un grupo táctico irrumpió a primera hora de la mañana en una vivienda de Presbítero Balbiano al 1700 donde se encontraba el audaz ladrón que había mantenido a la ciudad de Gálvez en vilo. El resultado fue el menos imaginado: en el interior de la vivienda había cientos de elementos que habían sido sustraídos de viviendas.

Leer más ► La morgue judicial de Rosario trabaja a destajo por la desmesurada frecuencia de crímenes

Alrededor de 21 teléfonos celulares; seis cámaras digitales; cuatro tablets; cuatro notebooks; tres netbooks; un posnet para celulares; un inhibidor de señales; un equipo registrador de firmas; 129 baterías de celulares; 24 relojes; un receptor de señales; 24 llaves de ingreso para viviendas; nueve llaves candado; múltiples llaves ganzúas, y dos equipos de comunicación tipo Handy, que según indicaron fuentes policiales en su momento tenían instalada la frecuencia policial.

Ladrón de las tres identidades2.jpg
La casa donde encontraron al delincuente.

La casa donde encontraron al delincuente.

A partir de allí, el ladrón de casas comenzó a construir su mentira. Es que apenas los agentes policiales lo redujeron y esposaron le preguntaron su nombre, a lo que el mismo dijo que se llamaba “Lucas Castañares”. ¿Era verdad?, con el tiempo la mentira iba a caerse.

Un misterioso en el subsuelo

Un día después de los allanamientos, la confusión por la identidad del hombre detenido en Gálvez se hizo notar. Primero porque en el calendario de audiencias que elabora la Oficina de Gestión Judicial de primera instancia aparecían tres nombres: Isaias o Isac López o Lucas Castañares.

El cinismo de López no paró igual. En agosto del 2018, quiso apelar el fallo que lo dejó en prisión preventiva pero cuando fue trasladado a la Sala 6 del primer piso de tribunales desistió de hacerlo y se echó atrás en su decisión.

Ese mismo día, en la Sala 4 del subsuelo tribunalicio, cerca del mediodía, el galvense fue imputado por el fiscal Marcelo Nessier por los delitos de “encubrimiento y violación de frecuencia” y por “robo agravado por escalamiento y fractura de puerta y de ventana”. En esa audiencia que se desarrolló ante el juez Jorge Pegassano, el delincuente volvió a ratificar que era Lucas Castañares su identidad y que su apodo era “Ale” y que nada tenía que ver con Isaias o Isac López. De hecho, aportó en ese entonces su supuesto número de documento sin ninguna duda.

Marcelo Nessier fiscal departamento San Jerónimo
Marcelo Nessier, fiscal departamento San Jerónimo que tuvo a su cargo la investigación.

Marcelo Nessier, fiscal departamento San Jerónimo que tuvo a su cargo la investigación.

Aquel día quedó un claro misterio en torno a cuál era la verdadera identidad del joven. Y aún más cuando se detectó que el muchacho en la red social Facebook se presentaba como “Roberto Saavedra”.

Dos días después de aquella incierta identidad, la jueza de la Investigación Penal Preparatoria, Sandra Valenti, ordenó que el sospechoso de los escruches permanezca detenido hasta tanto la causa se encamine al juicio luego de una audiencia que se llevó a cabo en horas de la tarde del 2 junio del 2018.

Identidad adulterada

Como el galvense tenía los diez dedos de su mano “totalmente ilegibles” -como si se hubiera quemado sus propias huellas digitales- su identificación llevó a que la Justicia deba comprobar su verdadera identidad con otros métodos. Mediante un examen de ADN, ordenado por el fiscal Nessier, se buscó develar la verdad identidad del acusado tras cotejar una muestra de sangre con la de un familiar. Era López, no cabían dudas, aunque faltaba la confirmación del Instituto Médico Legal de Rosario.

Y para confirmar totalmente que no era Castañares, agentes policiales de la Comisaría N°2 de Pergamino lograron encontrar al verdadero Castañares. El mismo era en ese entonces, un albañil que aseguró desconocer a López. "No sé quién es, no lo conozco, no conozco a nadie con ese nombre y apellido", explicó el hombre al que le habían usurpado su identidad.

Leer más ► La profecía maldita de los agentes de la DEA en los '90 sobre el presente de Santa Fe

El cinismo de López no paró igual. En agosto del 2018, quiso apelar el fallo que lo dejó en prisión preventiva pero cuando fue trasladado a la Sala 6 del primer piso de tribunales desistió de hacerlo y se echó atrás en su decisión. Sabía que su mentira, poco a poco, se estaba cayendo.

Un año después de que el caso se tramitara en tribunales, llegó el informe tan deseado por el fiscal Nessier. El ADN realizado al falso Castañares reveló que el ladrón de las tres identidades era uno solo: Isaias López.