El ofrecimiento responde a un pedido concreto que la familia de Paglia había hecho al cumplirse un mes de su muerte, con el fin de acelerar la investigación que hasta el momento no cuenta con ningún detenido.
Desde el Gobierno aclaran que la identidad de quienes brinden información y de quienes sean adjudicatarios de la recompensa será mantenida en secreto antes, durante y después de finalizada la investigación y/o proceso judicial.
marcha por Walter Paglia 1.jpeg
Al cumplirse una semana del crimen, familiares, amigos y vecinos de Walter Paglia marcharon desde el Ministerio de Seguridad hasta los Tribunales para pedir justicia.
La información y los datos relativos a la causa deberán ser aportados en cualquiera de las sedes de las Fiscalías Regionales del Ministerio Público de la Acusación:
- Fiscalía Regional N° 1 sita en Av. General E. López N°3302 de la ciudad de Santa Fe;
- Fiscalía Regional N° 2 sita en calle Sarmiento N°2850 de la ciudad de Rosario;
- Fiscalía Regional N° 3, sita en calle Alvear N° 675 de la ciudad de Venado Tuerto;
- Fiscalía Regional N° 4, sita en calle Iriondo N° 553 de la ciudad de Reconquista;
- Fiscalía Regional N° 5, sita en calle Necochea N° 44 de la ciudad de Rafaela.
El pago de la suma fijada en el Artículo 1° de la presente será abonado previo informe del representante del Ministerio Público de la Acusación y de la Dirección Provincial de Protección de Testigos, en relación al mérito de la misma.
El crimen de Walter Paglia
El 13 de junio pasado, Walter Paglia dormía en su casa del barrio Mayoraz junto a sus dos hijos de 16 y 20 años. Los tres residían en un departamento interno, ubicado sobre Castelli al 3000, el cual comenzaron a habitar unos dos años y medio atrás.
Walter Paglia.jpg
Walter Paglia tenía 47 años, era viudo y padre dos hijos. Trabajaba como filtrador en la cervecería Santa Fe.
Aquel día, Walter tendría que haber ido a trabajar a la cervecería en donde se desempeñaba como operario del área de filtrado. Sus hijos, por su parte, a la escuela y facultad. Sin embargo, todos aquellos planes rutinarios quedaron truncos al irrumpir en la casa un sigiloso ladrón que en cuestión de segundos se convirtió en un claro homicida.
Cerca de las 5.30, Walter escuchó ruidos y al despertar detectó que un delincuente estaba en los pies de su cama. Ambos se trenzaron en lucha, pero tras un forcejeo, el maleante aprovechó el estado de indefensión del dueño de casa para asestarle dos puñaladas letales para lograr escapar del domicilio.
