Se trata del entonces jefe de la Brigada esperancina, Lucas Gabriel Nos y el cual fue sentenciado a 4 años y 10 meses de prisión, por los delitos de asociación ilícita, malversación de fondos públicos, omisión de los deberes de funcionario público y encubrimiento agravado.
Junto al subcomisario y por la misma pena fueron sentenciados sus subordinados: el suboficial, Matías José Cosentini; y la oficial María Belén Muratore, que integraban el Grupo de Trabajo “Las Colonias” de la entonces Agencia de Investigación Criminal.
La resolución, en tanto, condenó a Rubén Darío Moyano, el cual se desempeñó como jefe de la Brigada de Drogas del departamento San Jerónimo, con sede en la ciudad de Coronda.
Una condena en juicio abreviado
El reciente fallo se dictó en el Tribunal Oral Federal y fue resuelto en el marco de un juicio abreviado pactado entre el fiscal general, Martín Suárez Faisal y las respectivas defensas de los policías: Fernando Sánchez (defensor oficial), Sebastián Gervasoni, Germán Ricardo Corazza, , Martín Rodrigo Montegrosso, Juan Ramón Aguilar, Candela Zini, Mauro Emilio Prgomet, Rebeca Mazzon, Hilda América Knaeblein y Raúl Oscar Sartori.
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Maiquel Torcatt / Aire Digital
El acuerdo fue homologado por el juez Luciano Lauría que declaró a Nos y Cosentini autores penalmente responsable de los delitos de asociación ilícita en concurso real con malversación de caudales públicos y encubrimiento agravado por ser el hecho precedente un delito especialmente grave, por actuar con ánimo de lucro y por ser funcionarios públicos, en concurso ideal con Incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Muratore, en tanto, fue condenada por integrar la asociación ilícita y por falsificación de documento público agravado por ser funcionaria pública, en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Moyano, por último, fue condenado por malversar caudales públicos, encubrimiento agravado por actuar con ánimo de lucro y por ser funcionarios público, en concurso ideal con incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Por el caso también fue condenado a tres años de cárcel el narco santafesino, Daniel Carlos Segovia, por integrar la asociación ilícita. El mismo fue quien proveía a los policías del material estupefaciente que luego se distribuía en los puntos de venta que la Brigada debía investigar.
El fallo a su vez, condenó a tres años de prisión a una serie de vendedores barriales de droga que integraron la red delictiva: Rocío Guadalupe Córdoba; Andrés Avelino Belizán; Andrea Delfina Córdoba; y Sol Micaela Morel.
Destape de un entramado de corrupción policial
La causa tuvo su inicio a partir de un video en el cual quedó registrado un encuentro en Santa Fe que mantuvo Segovia con los agentes de la Brigada de Drogas que viajaron hasta la capital provincial a bordo de un automóvil oficial de la dependencia que fue retirado el 24 de febrero del 2023 y fue devuelto cuatro días después a la repartición.
La investigación, que fue impulsada por el fiscal federal Gustavo Onel, tuvo en cuenta un teléfono celular que le secuestraron al suboficial Matías Cosentini en el marco de una causa que impulsa el fiscal del Ministerio Público de la Acusación, Ezequiel Hernández. En esa pesquisa, el suboficial Cosentini había denunciado el extravío de su arma reglamentaria, pero el fiscal Hernández no le creyó e inició una causa para establecer si realmente fue perdida, vendida o alquilada, por lo que allanó el domicilio del entonces agente de drogas y secuestró su teléfono, el cual fue la llave para descubrir cómo operaba la “brigada narco de Esperanza”.
Extorsión sexual
Los mensajes fueron enviados vía whatsapp.
Según los peritajes al teléfono de Cosentini, el suboficial le escribió a un teléfono alternativo que habría utilizado Nos el 2 de diciembre del 2022: “Amigo… Cucha la mercadería de los amigos… Serían 19 mil los 10 gramos?”, a los que el jefe de la repartición le contestó “claro… 190 mil los 100 gramos. Ellos venden casi 100 gramos cada 2 días … Y los findes deben vender 1 cuarto”.
Con posterioridad, -en enero de en enero del 2023- el suboficial dialogó con Nos sobre represalias a tomar con un vendedor de drogas que no abonaba sumas de dinero para continuar con la transa narco. “Le mandé que paguen mañana porque tenemos un montón de filmaciones y pruebas para reventarlos” y Nos les respondió: “Son ratas …Los vamos a meter en cana a todos … por verga”.
Las maniobra estaba tan aceitada que los agentes dialogaban de hasta "plantar estupefacientes en procedimientos policiales" y así garantizar resultados positivos en allanamientos otorgados por la Justicia federal.