El fiscal federal Walter Rodríguez había solicitado que se indague a C. Maldonado y A. Nazara, dos suboficiales de la policía santafesina, por considerar que son parte de la banda comandada por los hermanos Bergallo, dedicada a la venta de drogas en Santa Fe y Cañada Rosquín.
Rodríguez solicitó las indagatorias por considerar que los policías habían incurrido en los delitos de confabulación e incumplimiento del deber de funcionario público.
El juez Francisco Miño atribuyó los hechos en marco de la indagatoria que tuvo lugar el martes en el juzgado federal.
A Nazara se le atribuye haber utilizado su actividad policial para brindar información últil para que los Bergallo se mantengan al margen de las investigaciones y puedan realizar su actividad ilícita.
Por otro lado, a Maldonado se lo acusa de haberse encargado de conseguir compradores, realizar las entregas y coordinar puntos de encuentro para las transacciones.
Según pudo saber Aire de Santa Fe, al estar frente al juez uno de los suboficiales no declaró, mientras que el otro intentó brindar algunas explicaciones sobre escuchas que figuran en la causa y que lo vinculan con el clan.
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