De forma simultánea, como informó AIRE de manera exclusiva, también se llevaron a cabo cuatro allanamientos en domicilios de la ciudad de Santa Fe vinculados al escribano y operador judicial, Santiago Busaniche, considerado una pieza central dentro del expediente.
El principal objetivo de ese allanamiento fue el secuestro de su teléfono celular, cuya pericia será determinante para establecer nuevas responsabilidades.
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Una constructora bajo la lupa
Según informó el corresponsal de AIRE en Rosario, Rodrigo Miró, las fuerzas federales ingresaron además a las oficinas de una empresa constructora que quedó en el centro de la investigación por el traspaso de un terreno que habría terminado en manos de un familiar de Bailaque.
Los investigadores sospechan que la firma pudo haberse beneficiado con decisiones tomadas por el exmagistrado, actualmente apartado del Poder Judicial.
Mensajes y vínculos en la trama judicial
La decisión de los allanamientos surgió luego del análisis del celular de Carlos Vaudagna, donde los peritos hallaron mensajes con Busaniche. En esas conversaciones, ambos habrían hecho referencia a la causa iniciada en el juzgado de Bailaque contra el financista Claudio Iglesias, quien habría sido víctima de una extorsión en 2019 a partir de una denuncia anónima falsa generada en la AFIP y derivada al despacho del exjuez.
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De forma simultánea, se realizaron allanamientos en Santa Fe.
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Busaniche es señalado por fuentes judiciales como un operador con amplios vínculos dentro del sistema judicial federal, tanto en Santa Fe como en Buenos Aires. Su figura genera recelo en distintos ámbitos del Poder Judicial, donde se lo describe como un hombre influyente y de perfil reservado.
La investigación continúa bajo la órbita de la Justicia Federal. En los próximos días se analizarán los dispositivos secuestrados y se espera que esos peritajes permitan determinar el alcance de las comunicaciones y las posibles responsabilidades en la red que habría favorecido intereses judiciales y empresariales durante los últimos años.
