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El norte santafesino: ¿tierra liberada de abusos sexuales?

Detrás del suicidio de una menor en el año 2016, se tejen las peores versiones. Los funcionarios judiciales actúan con cierta pereza y administran las causas como si se tratara de “delitos comunes”. Muchos acusados de violar o acusar, permanecen en libertad. Entre ellos, un cura. Un grupo de Monjas, se anima a darle pelea.

Jésica Zanabria, tenía once años en 2016. Y “decidió” quitarse la vida con el cinto blanco de su guardapolvo, justo el día en que se celebraba e día del niño. Desde entonces, la Justicia sólo lo aborda como un suicidio. Pero no avanza sobre la causa que llevó a la niña a no soportar su existencia.

“No tenía signos de violación, sólo una defloración de antigua data”, le dijo un miembro del Ministerio Público de la Acusación a una abogada que intenta esclarecer los hechos. La niña no había sido abusada antes del suicidio, sino antes. ¿ que es la antigua data, en una vida de 11 años? ¿ Quién normaliza “una defloración”, y piensa que se olvida?

El caso de Jésica, impactante por su trágico final, es apenas una muestra de la levedad con la que el abuso sexual se admite culturalmente en el norte santafesino. “El problema de Jésica es que andaba siempre con una putita” dice un funcionario judicial en off. La “putita” es una amiga de Jésica que tenía 13 años entonces.

Los reconquistenses hablan con naturalidad de las “Peñas de los Jueves” en el Puerto. Y los docentes reconocen que en las escuelas primarias y secundarias de la zona, los viernes tienen altos niveles de ausentismo de niñas y niños. En algunas ocasiones tuvieron que llamar a los servicios de emergencias para que atendieran a  niños que se desvanecieron en el aula, porque “no habían dormido la noche anterior” y en otros, por la visible ingesta de alcohol con la que llegan a veces al aula.

“El tema Puerto” es una mezcla de mitología con claros efectos reales. Efectivamente los vecinos ven desfilar menores hacia el lugar cuando la noche del jueves se hace finalmente oscura.

Los abogados de las víctimas trabajan con las dificultades propias de las zonas donde todos se encargan de hablar por lo bajo y contar historias truculentas, pero que nunca aceptan hablar frente a los estrados judiciales. La “trata” cómo siguen llamando al tráfico de seres humanos, y las violaciones se han vuelto moneda corriente.

tía

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Los últimos meses han sido agitados y confusos en los tribunales de Reconquista: Tanto en el Federal, como en los provinciales. Varias causas tomaron estado público, y algunas de ellas ya recibieron condena:

El hijo del ex Comisario Walter Onieva , Walter Ezequiel Onieva, recibió el beneficio de la prisión domiciliaria por parte del Juez Mauricio Martelossi pese a que cuando comenzó la investigación se había fugado y cuando se entregó lo hizo sin el celular, entorpeciendo la investigación

El juez no hizo caso a los pedidos de la Fiscalía y la Querella que pretendían que Onieva continúe tras las rejas ya que es muy peligroso tenerlo en libertad porque hay muchas víctimas que están confesando haber sido abusadas o contactadas por el imputado. 

Miguel Ángel Portillo fue condenado a 10 años de prisión por abusar sexualmente de la hija de su concubina en la ciudad de Vera. El Tribunal verificó que Portillo, de 50 años, abusó durante 5 años de la menor.

Pasaron ya dos años y medio de la denuncia y el procesamiento del cura Néstor Fabián Monzón, por  abuso sexual de una niña y un niño, que generó conmoción en Reconquista; la familia de las víctimas espera el juicio oral y público para exigir que vaya preso.

sacerdote monzon

En las últimas semanas se presentó una denuncia por graves hechos de presunto abandono de personas en tres hogares de la Fundación Ángel. Las monjas que constituyeron en Reconquista la organización “Infancia perdida”, reclaman por el estado en el que se encuentran los menores alojados y denuncian que la Directora de uno de los hogares fue testigo de una violación entre menores “Dos chicos de doce años estaban violando a una nena de 7, y la directora en lugar de denunciarlo se calló la boca y se limitó a recriminarselo a los niños, sin ponerlo a consideración de la justicia”

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La situación está “caliente” dicen algunos vecinos. Sobre todo desde la aparición en la ciudad de los Diputados Jorge Henn y Carlos Del Frade, que perturbaron la “circulación natural de los chismes”, y comenzaron a exigir explicaciones por los hechos que se relatan.

En Reconquista, en Vera, en Tostado y en cada uno de los pueblos del Norte santafesino  circulan versiones de todo tipo, en las que se incluye a personajes importantes de la vida económica e institucional de la zona.

Lo mismo ocurre cuando se visita la Costa de San Javier y se susurra la presunta existencia de un “Turismo pedófilo”, que dicen, traen a algunos europeos que se disfrazan de cazadores para explicar su presencia en el lugar. Todo es mito, salvo que la justicia tome la decisión de avanzar sobre los hilos sueltos que van dejando las denuncias.

El Norte santafesino, parece, una tierra liberada para el abuso sexual de menores. La Justicia empezó a dar algunos indicios. Pero falta decisión para destapar el manto principal.

La Dra. Luciana González es abogada e investiga casos de abusos sexuales en Reconquista. En Sin Querer Queriendo, la letrada aseguró que “el norte santafesino es absolutamente distinto a lo que vemos en Rosario y Santa Fe capital”.

Es que los abusos sexuales en las localidades provinciales que se acercan al Chaco, “no son nuevos”. Sino que salen a la luz porque “es algo que se empieza a denunciar y desnaturalizar“.

Aunque una vez que se cuestionan estos delitos dentro del ámbito familiar, todavía queda una piedra más por sortear: el poder judicial. “En el norte hay una Justicia para pobres y una Justicia para ricos”, señaló González. Incluso, “uno se preguntaba hasta dónde los jueces habrán participado en los mismos delitos que les tocaba juzgar”, concluyó.

La palabra de la Dra. Luciana González

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