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Policiales

Se define la situación de un adolescente que mató a dos jóvenes en un accidente de tránsito

Esta mañana se llevó adelante el primer debate oral y público por dos muertes en un accidente de tránsito. La principal oposición entre las partes pasa por cómo cumplirá la sentencia el conductor del automóvil.

Lucas Javier Pérez es un joven de 22 años (tenía 19 al momento del siniestro), oriundo de Recreo. El 22 de mayo del 2016, minutos antes de las 7 de la mañana perdió el control del automóvil que conducía y embistió a dos peatones. Las víctimas también eran dos jóvenes de la misma ciudad: Matías Bleckmann y Zacarías Márquez, de 22 y 16 años.

 

La responsabilidad del conductor nunca fue cuestionada, como así tampoco las circunstancias: conducía a alta velocidad, imprudentemente y alcoholizado. Por estos motivos perdió el control del automóvil en una curva, chocó primero contra un poste de luz, zigzagueo y embistió a los dos jóvenes que caminaban por la banquina.

Leer más ► Comenzó el juicio contra el conductor que atropelló y mató a dos jóvenes en Recreo en 2016

 

Un juicio sin demasiadas contradicciones

 

En el debate se dieron por probados los extremos de lo ocurrido por un acuerdo probatorio entre las partes.

 

Sólo dos testigos fueron convocados ante el juez Nicolás Falkenberg. El ingeniero que realizó la pericia de la mecánica del accidente, y una joven, novia del imputado quien iba con el en el auto.

 

El perito estableció una velocidad promedio de entre 113 y 133 km/h, y determinó que el accidente se produjo porque el conductor perdió el control del auto debido a la alta velocidad y a la presencia de alcohol en sangre, más del doble de lo permitido.

 

A su turno la testigo manifestó no recordar nada del momento del impacto, y brindó precisiones sobre su relación con el imputado, el vínculo familiar y demás detalles de la vida cotidiana.

 

Tras esta declaración, hizo uso de la palabra Pérez. El joven expresó cómo el siniestro afectó a su madre, y dijo que desde el día del hecho él no maneja ni sale de su casa “por respeto a todos”.

 

¿Condena preso o libre?

 

La diferencia sustancial es la pretensión punitiva de la fiscalía, la querella y la defensa.

 

La Dra. Carolina Parodi solicitó tres años de prisión y ocho años de inhabilitación para conducir. Parodi destacó en los alegatos de clausura la actitud del imputado durante el proceso y solicitó que la pena sea de ejecución condicional.

 

La querella pidió la pena máxima de cinco años de prisión. El abogado Pedro Mendoza representa a Irene, mamá de Matías. Expresó que “la actitud que se tiene que valorar es la previa al hecho. El imputado no tuvo deber de cuidado con la vida, que es el bien mas preciado de todo ser humano. Sabía que era horario de salida del boliche y esa curva es súper conocida en la zona por los despistes”.

 

A su turno el defensor particular Martín Risso Patrón insistió que la pena no debía ser privativa de libertad. Explicó que el joven estudia y trabaja, y que le restan dos materias para recibirse. “La pena no restituye el daño causado. La cárcel es para resocializar. ¿Cómo re-socializar a alguien que ya está inserto en la sociedad?”.  Solicitó la pena mínima que regía al momento del accidente de dos años de prisión.

 

El juez Nicolás Falkenberg dará a conocer su decisión el próximo viernes por la mañana.

 

 

 

 

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